Artesana transforma discos compactos en joyería imagen

Rosario Leiva es una mujer emprendedora, quien se ha dedicado a elaborar artesanías con discos compactos (CD, en inglés).

Las opiniones e imágenes de este artículo son responsabilidad directa de su autor.

Los CD marcaron una época. El milenio hacía una transición -del segundo al tercero- y los casetes se iban extinguiendo junto con los años 90. Justin Timberlake, Beyoncé, Eminem y Pink, entre otros, comenzaban a sacar sus álbumes musicales en CD y era una locura. Pero, incluso, estos artefactos comenzaron a perder poder con la llegada del Universal Serial Bus (USB).

En el mundo del arte, como en la ciencia, la materia prima no perece, solo cambia. Rosario Leiva, una artesana, vio la posibilidad de comenzar a hacer arte partiendo de discos compactos viejos.




Larouart




Larouart es un proyecto de reciclaje de CD, en el que dicho material se utiliza para crear joyería: aretes, collares y anillos.










“La idea es ampliar un poco más el proyecto. He empezado a crear colgantes para las ventanas y jardines; también estoy trabajando en la idea de pronto poder realizar lámparas. Hace poco incluí ganchos para pelo y pines para la ropa”, expresa Rous.




El proyecto de Larouart existe hace más de seis años.

Inició cuando di a luz a mi hija y me di cuenta de que podría aprovechar el tiempo en el que ella dormía para poder crear algo propio. Pasaron varios días y no se me ocurría qué hacer, hasta que un día, ordenando la casa, encontré varios CD de música, rayados y sin usar, y ahí fue cuando se me ocurrió tener un proyecto de reciclaje, de darle vida a algo que ya no use utiliza”, comenta Leiva.

Lo que busca Larouart

El objetivo de este proyecto es poder recolectar la mayor cantidad de discos compactos posibles en Guatemala. Hace poco, Rous descubrió que las recicladoras ya no aceptan los CD y que ya nadie hace nada con ellos, esta fue su mayor motivación al comenzar con dicha iniciativa.

 “Quiero evitar que los CD se conviertan en basura y lleguen a los océanos, y de alguna manera darle un pequeño respiro a la Madre Tierra”, afirma.

Amor al arte y a la naturaleza

Cada pieza es pintada a mano, y luego pasa por varias etapas hasta lograr ser un accesorio representante de Larouart. 




Normalmente me demoro entre 7 a 10 días en realizar 20 piezas de joyería, dependiendo de su complejidad. Hace poco estuve trabajando en unos colgantes y en 10 días solo logré realizar dos, tomando en cuenta que también trabajo en un restaurante varios días a la semana. Me encargo de las redes sociales y a esto hay que sumarle que tengo una hermosa hija de 5 años”, explica Rous.

Larouart es posible gracias a las donaciones de CD por parte de amigos, conocidos y demás personas que siguen y apoyan el proyecto. Por el momento, hay dos lugares en donde se están recolectando:

1. Bar El Ilegal, ubicado en Antigua Guatemala: 7ª. Avenida Norte, Casa #2.

2. Curandera, ubicado en Ciudad de Guatemala, 14 calle 7-71 de la zona 9, plaza 14. 







También pueden comunicarse directamente con Rous, por medio de sus redes sociales: Instagram (la.rous) y Facebook (Rous Leiva).

El mundo no aguanta más, debemos cambiar nuestros hábitos y ver la forma de reducir nuestra basura, reciclar, rehusar, convertirlo en algo más. Es importante apoyar a los artistas locales y el trabajo artesanal. Este lleva un pedacito de corazón y amor. Es algo único”, refiere la emprendedora.

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