El reino de terror del Canche Reyes en Cuyotenango imagen

Una mezcla de amor y miedo, donde el segundo refuerza al primero, han sido su estrategia para afianzarse en el poder. “El Canche Reyes”, como le conocen sus vecinos es hoy por hoy el modelo a seguir para una nueva generación de políticos en la costa sur.

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En el pueblo, del diente al labio lo aman, se refieren a él como “un gran hombre” y aplauden su figura. Pero, a sus espaldas cuentan otra historia, una donde es mejor seguirle el juego y evitarse problemas. Su bien publicitada fe en Jesucristo ha motivado a sus simpatizantes para que lo defiendan de sus detractores. Y cuando esto falla, el emperador de Cuyotenango mantiene a sus patrios sometidos bajo el miedo y las balas. Jorge Arturo Reyes Ceballos, con versículos, armas y balas es aclamado en Cuyotenango.

Sus casi 21 años en la vida pública de Cuyotenango, le han convertido en un referente para quienes aspiran a la jefatura edil de los municipios vecinos. Llegó para quedarse, sostienen sus detractores. Junto al Frente Republicano Guatemalteco, comenzó en 1999, uno de los gobiernos municipales más largos de los que se tenga memoria. “Y no fueron por sus obras o los beneficios que ha traído a la comunidad”, sostiene un vecino.

Una mezcla de amor y miedo, donde el segundo refuerza al primero, han sido su estrategia para afianzarse en el poder. “El Canche Reyes”, como le conocen sus vecinos es hoy por hoy el modelo a seguir para una nueva generación de políticos en la costa sur. Una visita a la comuna del lugar donde en un pequeño, pero vibrante parque central, es la sede del gobierno local de Reyes.

Por las calles que circundan la aglomerada plaza, los mensajes religiosos y los versículos bíblicos, les recuerdan a los habitantes lo cerca que vive de Dios su emperador. Incluso, en la entrada de la alcaldía se puede leer: “Gloria y Honra solo para JESUCRISTO”. Pero todo apunta a que Dios necesita de ayuda para cuidar de su hijo bien amado, que en 2011 se cambió de partido y se unió a los “Patriotas” y más recientemente a la Unión del Cambio Nacional (UCN) de Mario Estrada, con la que fue reelecto.

La entrada de la comuna es custodiada por dos agentes armados con escopetas y equipo de comunicación. Vestidos de negro y con gorros que les identifican como policía municipal, son apoyados por un segundo grupo de guardias vestidos de particular. Con la camisa de fuera, para disimular las escuadras y radios que portan, otros dos cuidan el ingreso a la oficina del alcalde donde antes de entrar son desinfectados por un niño con un atomizador con alcohol. Mientras que un quinto elemento deambula por los pasillos llevando una camisa camuflada, mientras coordina las actividades del cuerpo de seguridad.

Luego de cruzar el umbral, y dentro de la recepción, sillas adornadas con herraduras y caballos sirven de estantería para lo que sugiere son vajillas y utensilios para regalar a sus vecinos. En lo alto de la pared fotografías del alcalde y en un cuadro pintado sobre una toalla, donde dos manos se entrelazan y una paloma bate sus alas se puede leer la gratitud del jefe edil para con el creador. “Gracias señor por tener misericordia de mí……Bendito sea Jehová para siempre ¡Amén! Att. Canche Reyes”.

Reyes Ceballos, quien no se encontraba en la comuna cuando le visitamos, se mueve por su pedacito de imperio sin aparente pena. Pero, una mirada al dispositivo de seguridad que le acompaña deja ver que el “Canche Reyes” le teme a algo. Doce hombres armados viajan en la comitiva de vehículos que se desplazan por la pequeña localidad. Vestidos de particular, algunos y otros con chalecos cuidan del gobernante a cada paso que da.

Y no es para menos, aseguran sus detractores. “El Canche Reyes” espera lo peor mientras ora por la salvación. “Él les ha hecho daño a muchas personas y hasta algunas que no se tientan el alma para cobrárselas”, sostiene el vecino. Su gestión ha sido todo menos transparente, según lo revelan denuncias de los vecinos y auditorías de la Contraloría General de Cuentas de la Nación (CGCN).  

“Proyectos sobrevalorados y de mala calidad nos llevaron a denunciarlo con el diputado Amílcar Pop, quien debía fiscalizarlo”, aseguran los vecinos. “Pero esto se quedó en palabras, pues el ‘Canche’ siempre se sale con la suya y hace lo que quiere”.

A las denuncias de los vecinos se sumó, en 2016, una auditoría de la CGCN sobre el gasto de la comuna. Pero, los vecinos, afines al alcalde impidieron, que esta se llevara a cabo luego de atacar a los delegados. Tres años antes, en 2013 el informe anual de la contraloría detectó que el contrato No. 002-2012 por Q968 mil, para el mejoramiento del camino rural de la aldea Concepción La Ceiba, no cumplió con todos los requisitos de ley. “No cuenta con informes de supervisión de avances físicos y acta de liquidación”, reza el documento.

En 2005, Reyes Ceballos fue señalado por la empresa Ferrovías de Guatemala. Según la denuncia, el alcalde habría ordenado a sus empleados remover parte de la línea del tren a la altura de las millas 317 y 318 para abrir un camino vecinal. Una vez más, nada pasó.

El emperador de Cuyotenango vela también porque la fe de sus feligreses esté tan bien cuidada como su espalda. Y para ello dispuso de un lote municipal, aseguran sus detractores, para la edificación de la iglesia Casa del Alfarero, donde el alcalde tiene fuertes nexos.

Ahora, Casa del Alfarero se relaciona con “El Canche Reyes” y allí cientos de adeptos y los más temerosos del alcalde, se dan cita para compartir la palabra de Dios y algo más. De acuerdo con la publicación Actualidad Evangélica (AE), grupos de narcotraficantes tratan de usar estas iglesias para lavar dinero. Según AE el mismo Chapo Guzmán en México, habría intentado utilizar estas agrupaciones para lavar millones de dólares producto del narcotráfico.

Asentada a la orilla de la carretera, la iglesia que se le adjudica al alcalde es casi imperceptible. Pero, los colores de las paredes, mismos que comparte con la municipalidad y las voces de los vecinos, los días de servicio, dejan en claro el uso del inmueble. “Habrá entre unas 400 o 500 personas que asisten a la iglesia del alcalde y es allí donde los grandes negocios de la muni se hacen”, asegura un vecino.

Llámesele como se le llame, emperador, hermano, alcalde o simplemente “Canche Reyes”, Jorge Arturo Reyes Ceballos lo tiene claro. En un pueblo pequeño lo que no se logra con la palabra de Dios, con plomo se consigue.

Relato intentó entrevistar al alcalde de Cuyotenango, pero no fue posible durante nuestra visita. Dejamos los contactos a la espera de una respuesta del jefe edil, pero este no respondió.

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