Leono, el felino del Zoológico La Aurora que tiene sus días contados
Leono ya está cansado. Son 21 años que ya le pesan al felino que seguro conociste cuando eras niño o adolescente.
La artrosis degenerativa ha hecho mella en los huesos de sus rodillas y caderas, además prefiere asolearse y dormir durante más tiempo del normal.
Su apetito ha disminuido y come menos que antes.
Con su edad, las enfermedades han llegado, y corre el riesgo que una enfermedad renal y otras más propias de su edad también lo puedan afectar.
Leono, se siente adolorido, y por eso el temor de los personeros del Zoológico La Aurora, de que pueda morir en los próximos meses, ha hecho que le preparen un homenaje al rey de la selva, en los próximos días.
Ellos han cuidado de Leono desde que era un cachorro, cuando fue llevado un día de 1997 joven y radiante al zoológico.
Vecinos del Volcán de Pacaya lo vieron merodear a sus gallinas ese año y llamaron para que lo apresaran.
Y desde entonces comenzó su vida en cautiverio.
Nadie sabe quién lo dejó abandonado allí y no le importó, así se convertiría en el León de la Aurora, a quien bautizaron desde ese día como Leono
Miles y miles de ojos se han posado sobre su figura para observar sus movimientos y escuchar sus rugidos, pero estos se han ido apagando con el tiempo.
Hoy, su pelo luce opaco y su apetito ha mermado. La vejez le llegó a Leono y solo su hija y su compañera de vida lo acompañan en el recinto para cuando llegue el momento final.
¿Fuerzas? Ya las ha perdido.
Fotos: panoramio, skyscrapeCity, GUIDIL.com Hola ciudad, achus!