El maquillaje es caro y la realidad es que no todas podemos costear un delineador de más de Q200.00 o una base de hasta Q500.00. Desde hace un par de años, la industria de los cosméticos se ha convertido en víctima del mercado negro, el cual ofrece a todas las mujeres del mundo imitaciones “de marca” a precios muy bajos.
Sin conocer su origen, sus ingredientes y la calidad de estos, muchas mujeres seducidas por los bajos costos, han optado por comprar estos productos, sin dimensionar las graves consecuencias de su uso.
Imagina, seis productos por un total de Q350, cuando en cualquier tienda registrada una sola base podría costarte eso o más.
¡No se trata de comprar barato o caro! Es que los productos que utilices en tu piel no la dañen. Además, es importante considerar que la “marca” no es cuestión de moda, es más bien, una garantía que tú tienes como consumidora, que lo que estás comprando cumple con los estándares de calidad aprobados por las autoridades.
La compra no es el único problema de la venta de cosméticos falsificados, sino más bien que este es un negocio lucrativo, ya que, se estima que para el 2020 la industria del maquillaje generará ganancias de hasta US$675 billones, de manera que, la venta de cosméticos (originales e imitaciones) se ha convertido en una fuente de trabajo importante y, por ende, muchas personas también quieren formar parte de esto, sin conocer qué es lo que están vendiendo.
La venta de replicas de MAC, Kylie, Urban Decay, Naked y otras marcas es un problema en todas partes del mundo y Guatemala no es la excepción.
¿Cuántas veces no has visto en tu feed de Facebook un anuncio como estos?
Muchas hemos comprado estos cosméticos, ¿no? Y la verdad es que aunque sean réplicas cumplen con su cometido. La base nos cubre las imperfecciones, el rímel y el delineador nos ayudan a enmarcar nuestros ojos, el blush nos da el toque de color que necesitamos y así nos enamoramos del maquillaje que compramos.
Pero, ¿alguna vez te has preguntado cómo es posible que los vendedores puedan ofrecer estos productos a tan bajos precios?
Aquí te explicamos un poco:
Estos productos son hechos, en su mayoría, en China y se pueden comprar en línea. Los precios bajos se deben a que: (a) los ingredientes que se utilizan en estos cosméticos son diferentes y (b) no hay costos asociados a controles de calidad.
Las grandes marcas han emprendido campañas en contra de la imitación de productos de belleza y, como consecuencia de ello, han colaborado con las autoridades para frenar la expansión y venta de estos. Como parte de los esfuerzos, los cosméticos han sido sometidos a pruebas por las autoridades con el propósito de identificar los ingredientes y poder combatir esta epidemia de maquillaje “falso” con campañas de concienciación.
Los resultados arrojan que el mercurio, cianuro, arsénico, gasolina, orina de caballo, bacterias, plomo, pegamento y pintura son algunos de los elementos que componen estos productos.
Aunque el plomo, por ejemplo, también se encuentra en productos originales, en las imitaciones se superan los límites permitidos, por lo que, la salud de tu cutis se pone en riesgo. El uso prolongado de réplicas de cosméticos puede llegar a provocar quemaduras en nuestra piel, infecciones en los ojos, alergias, sarpullidos, entre otros.
La próxima vez que estés tentada a comprar réplicas de cosméticos, recuerda que, ¡lo barato sale caro!
Fuente: Refinery 29 & Daily Mail.