Es principio de diciembre y con el equipo de Relato llegamos a las instalaciones de Santa Inc. –una división de Pepsi Co. & Time Warner– y bueno, la experiencia fue genial. Publicamos hasta hoy la entrevista debido a un embargo de exclusividad contra demanda. Si algo aprendimos es que el bufete de Santa es letal y, siendo un medio pequeño, no quisimos correr el riesgo.
Comenzaré diciendo que la vida en el Taller de Santa está lejos de ser una construcción de madera improvisada en medio de un desierto de hielo. Por el contrario, resulta ser un parque industrial que ocupa terrenos mágicos hasta donde alcanza la vista. Este es nuestro Relato navideño*.
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Señor Claus… gracias por su tiempo…. Sé que….
– No, por favor, nada de señor, sin formalidades, llámame Santa, o Claus. Siéntete en confianza… es lo menos que puedo hacer luego de nunca llevarte nada, jo, jo, jo, jo.
– Sí, bueno, siempre gracias…
Ríete chico, no seas tan cascarrabias. Es un chistorete que tengo para todos mis visitantes.
– Supongo que ha de tener muuuucho tiempo libre…
Jo, jo, jo, jo, pues quizá no trabaje mucho, pero sí mucho más que el periodista guatemalteco promedio, ja, ja, ja… puedo seguir todo el día y no me ganarás. Creo que empezamos con mal pie, anda, pregunta.
Pediré leche y galletas… o prefieres vino y canapés… mmm no, puedo leer tu mente… ya sé, quieres ginebra… perdona que grite pero solo así entienden los elfos. ¡Sugarcube! ¡Trae dos vasos con hielo, con así de ginebra, un cachito de mineral, un dash de limón y con una rodaja de pepino, pero ya! Ya sé, pediré que nos traigan unos marisquitos para soltarnos un poco…
…p… pero Santa, son las 10 de la mañana…
– Tienes razón, es muy temprano. ¡Sugaaaaaar, mejor tráete todo para acá y sírvenos, cancela tus compromisos! La jornada será larga. ¿Y tu gente, qué toma? Hey, chicos Relato, ¿qué quieren? ¿Ah? Abstemios será… que prueben el ponche de la Señora Claus, saldrán cantando villancicos; en fin… decías…
– OK, sé que no hemos sido niños buenos desde hace mucho tiempo, pero queremos desmitificar tantas cosas que se dicen de usted. Digo, que se dicen de ti, que, bueno, esta es la oportunidad ideal. Antes que nada, ¡salud! La primera pregunta es: ¿existe pacto colectivo, sindicato o políticas de contratación amigables con su capital humano?
– Por favor, la pregunta es ofensiva. Mira por el ventanal de mi despacho, observa. Es un frenesí absoluto. Mira cómo trabajan los duendes. Todos están con sus herramientas, vuelan por aquí y por allá, es una auténtica danza de trabajo en equipo, es que ni me meto. Huy no, dios guarde, ellos solitos saben qué hacer.
Claro, nada es perfecto, tengo problemas con el capataz. Lo que pasa es que Chivi, se llama Archivald pero le decimos Chivi, es un duende enano. Entonces, como sabrás, no lo respetan. Mira, sé que soy de risa fácil, entonces no puedo ver cómo lo tratan sin reírme. Es que son crueles, pero el error está en que él se enoja por todo. La otra vez lo amarraron como collar de Rudolph… te digo, son crueles, jo, jo, jo.
Pero respecto de tu cuestionamiento, tengo varias divisiones: elfos encargados de juguetes, otro departamento encargado de descifrar las cartas de los niños, que mira, ese sí es trabajo. Como no le ponen importancia a la motricidad fina, los pequeños no aprenden a escribir bien y, de resultado, no les llega el regalo. Eso me gustaría decirlo, la culpa es de su mala caligrafía.
Tengo también un comité evaluador de buena o mala conducta y otro encargado de alimentar a los renos. Reconozco que tengo problemas de favoritismo hacia Rudolph, pero vamos, ese foco se debe mantener en óptimas condiciones, sobre todo porque es incandescente. Estamos en una licitación para cambiarlo a LED, tú sabes, hay que cuidar al talento.
Tuve un conato de huelga, Smiley convenció a Donner, Blitzen, Vixen y Cupid de correr a otro ritmo del de Comet, Dasher, Dancer y Prancer como medida de hecho para aumentar salario, pero afortunadamente Rudolph me avisó a tiempo.
¿Smiley, quién es ese? Nunca escuchamos un nombre así.
– Un reno que tuvimos que dejar ir por revoltoso. Me parece que ahora trabaja en una carnicería china. Le deseo lo mejor. –Sugar, dale otro trago al joven, total, con el frío ni se siente. Pues te digo, es una belleza ver trabajar a los duendecillos, el martilleo y su labor es tal que el fulgor compite con las auroras boreales. Un par de tragos más y verás de qué te hablo.
“¿Sabía usted que Santa utiliza las series de dibujos animados
y series navideñas como relaciones públicas?”.
Hablamos con una capataz de maquila. Dice que empiezan las labores en enero y que trabajan de ocho a ocho, que fabrican juguetes de madera –aún en esta época. Pero nos comentó que tuvieron problemas con un embarque de muñecas mal pintadas y que ahora les piden más videojuegos. ¿Qué dice al respecto?
– ¿Qué tal el trago? Rico vaa, su Santidad en persona me lo trajo la semana pasada… sí, Francis. Mira, es que con aquel somos cuates, digamos que no nos metemos en el territorio del otro, no como el anterior, a quien también tuvimos que dejar ir… mmmm bueno, pero… ¡ah, sí! Ahora respondo.
Lo primero, sí. Todavía hacemos juguetes de madera, que dicho sea de paso tenemos un manejo amigable con el ambiente. Lo que sucede es que, con el crecimiento de hipsters en el mundo se puso de moda regalar juguetes retro, y por eso respondemos a las exigencias del mercado. Recuerda que yo también obro por medio de la buena voluntad de la gente.
Sí, tuvimos problemas en el año fiscal 2014-2015 por un embarque de muñecas mal pintadas, pero resolvimos el problema a tiempo. Claro, tuvimos que dejar ir al duendecillo responsable, y ahora trabaja en un circo. Pero el trabajo no se lo conseguí yo, fue el bufete, ellos se encargan de eso. Tú sabes, cosas de derechos que no vienen al caso en esta entrevista.
Y con los videojuegos, pues mira, hijo, ¡salud! Te decía, los videojuegos me estaban ganando el mercado, pero una vez más le salimos al paso a la crisis. Mi equipo es muy proactivo y, bueno, logramos un TLC con Singapur, Taiwán y Corea… les compramos los videojuegos y subcontraté a otras divisiones asiáticas debido a la demanda. Y acá estamos, ya toda una empresa rentable.
“A Corea del Norte no puedo ir, su espacio aéreo es muy peligroso.
Lo siento por los niños del régimen, pero milagros no puedo hacer”.
¿Cómo alimenta a tanta gente?
– Pues no tengo chef, son los mismos duendes los encargados de toda la comida. Llego, les entrego los víveres, qué sé yo, cerdos, frutas y verduras, para que cocinen lo que se les ocurra. Aunque, claro, la señora Claus, tú sabes cómo es aquella, siempre los regaña porque tienen la cocina hecha un desastre.
¿Cómo es su señora?
– Es rechoncha, de mejillas rosadas y cabello blanco y siempre la puedes encontrar con una sonrisota en el rostro, al menos para los flashes. Le encanta salir en revistas. Claro, cuando la prensa se va del Polo Norte se quita el disfraz y saca la botella de vino. A esa sí le pesa el codo mira tú… me bota, con eso te digo todo. Lo que pasa es que dice que no es fácil “que su marido sea un workaholic”, pero como yo le digo: esas botellitas se tienen que pagar, no es que marchando lleguen solas a la alacena. ¿Otro traguito? Es que es bueno este elfo para los tragos, vaa. ¡Si aquí solo lo mejor!
Gracias a una visita guiada se pudo constatar que Santa les da vodka y un poco de polvos blancos de Navidad a sus renos para que trabajen con energía, y los elfos enfermos son tratados por mujeres curanderas que les proporcionan hongos mágicos.
Gracias, Santa, eres un gran anfitrión. Háblanos de tu departamento de diseño.
– Pues Elfen Duendmeister es el VP de Branding y Comunicación Visual de Santa Inc. y ese departamento tiene una dinámica laboral masiva. Decoración se encarga de la elaboración de motivos ornamentales para diversos productos, como papel de regalo, telas para cojines, etcétera. Cultura institucional se encarga de difusión interna, avisos para reuniones de elfos, rotulación de áreas, elaboración de boletines y comunicados diversos para fomentar la apropiada comunicación de las obras realizadas por el “bienamado Camarada Líder, Santa”.
¿Cómo? Eso suena a comunis…
– Así me dicen los muchachos, es una broma interna, tendrías que vivir acá para entenderla, jo, jo, jo, jo.
Te decía, también está promoción, que se caracteriza por la elaboración de materiales publicitarios de todo tipo: BTLs, anuncios de prensa, el catálogo de Santa, etcétera. Digital se ocupa de mantener una narrativa interactiva entre usuarios y Santa Inc. Lo hacen durante el año entero, pero principalmente en las semanas previas a la época navideña. También ve eso de las redes sociales, por supuesto, pero tiene un subdepartamento de desarrollo de apps para móviles que presentan entretenimiento freemium al usuario mientras reúnen big data de gran especificidad para los aliados corporativos de Santa Inc., entiéndase Pepsi Co. & Time Warner… tenemos un crecimiento agresivo. ¿Y si no, cómo me entero de si el regalo es de marcas amigas?
Bueno, Santa, gracias por tu tiempo…
– ¿Qué? ¿Solo esas preguntas son? Nombre, quédense a cenar, me tomo el día libre, ahí los elfos se harán cargo de todo, si el taller se maneja solito. Vamos, te voy a presentar al hombre de las nieves, ese se echa unos cócteles mirá, terminas pidiendo pelo. Recuerdo una fiesta de Año Nuevo que terminamos en febrero. Huy no, en fin, vamos, dejá ahí tus cosas, acá nadie roba.
El bufete de Santa, off the record
–Es frío, como el corazón de los abogados–, nos dice un duendecillo que se anima a revelarnos el detrás de cámaras de Santa, a nuestra salida del taller, tras el término de la cena que duró una semana de alegres reuniones.Explica que la otra cara de Santa es la de un señor que tiene cobradores enanos con cara de muy, muy, muy pocos amigos. Nos enteramos de que Rudolph tiene previsto plantear una demanda laboral debido a que no recibe el bono extra que requiere porque su nariz brilla. Al final, él solo lucha por un salario diferenciado.
Otro detalle es que el bufete de Santa se encuentra en Nueva York, cerca del Rockefeller Center. Se confirmó que tiene sucursal en Guatemala, además de que el juzgado que conoce está ubicado junto al de extinción de dominio –igual y ahí castigan a los adultos que se han portado mal. Por cuestiones climáticas, la célula guatemalteca está en Xela, pues es complicado trabajar en la capital con tanto abrigo. “Intentaron trabajar en el parque de la feria navideña de la zona 1”, dice, “pero Arzú no quiere vendedores ambulantes”.
Asimismo, confirmó que existe una demanda contra el presidente de la República Jimmy Morales (por hacer felices a los chicos malos) y que Santa también posee un expediente administrativo contra la Muni, debido a que el Alcalde pretende regular el tiempo en que puede entrar con su trineo volador a la ciudad; busca que permanezca más tiempo en las zonas 15, 14, 13 y 10, para favorecer a los niños de esas áreas. A su vez, el Alcalde tiene uno en contra de Santa, en el juzgado de asuntos municipales, porque los cascabeles superan los decibelios autorizados… digamos que es un pulso de quién tiene la razón.
Se sabe que los abogados de Santa en Guatemala están preocupados porque la parte contraria recusó al juez, y el motivo es que recibió un regalo del acusado (Santa). El argumento de los abogados fue que el hecho sucedió durante la infancia del juez, pero se recusa y se argumenta que Santa sabía que ese niño sería juez.
Hay otro juicio, pero laboral, porque los duendes de Santa son más de 20 (de hecho son 200 mil) y todos están por contrato, sin ventajas económicas, debido a que Santa dice que el espíritu navideño es la mayor ventaja económica del régimen. Aunado a ello, Santa no sabe si repartirá regalos este año en el IGSS porque no le dieron sus pastillas para la hipertensión.
*Agradecimiento especial a los profesionales Guillermo González, César Martínez, Priscilla León, Alejandro Alonzo y Rony Trujillo, quienes sirvieron como fuentes para esta entrevista.