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Este 28 de diciembre se celebra en muchos países el Día de los Santos Inocentes, una celebración pagana-cristiana. En ella, las personas realizan bromas sanas a sus familiares y amigos con el único objetivo de divertirse por un rato.

Sin embargo, la celebración tiene un pasado oscuro que no todos conocen.

El 25 de diciembre del año cero nació Jesús (la Navidad en la actualidad), viéndose una estrella sobre Israel que señalaba la llegada del rey de reyes. En ese momento, llegaron a Jerusalén unos sabios (los Reyes Magos), presentándose ante Herodes I el Grande, según lo plantea el libro de San Mateo del Nuevo Testamento.

Los sabios iban en busca del futuro rey de los judíos que acababa de nacer. Pero, Herodes temeroso de perder su poder, pidió a los Reyes Magos que fueran en busca de este niño. Al ver que no volvían, decidió acabar con el problema enviando un grupo de soldados a Belén.

La orden era asesinar a cualquier niño menor de dos años que se encontrara en el lugar, la matanza tuvo lugar tres días después, o sea, el 28 de diciembre. Según se relata en la Biblia, Herodes rodeó la ciudad de Belén con su ejército, pero un ángel advirtió a San José para que lograra huir a tiempo de Egipto.

Para recordar a las víctimas, la iglesia católica instauró esta fiesta como homenaje, uniéndola con otras celebraciones paganas. Por ello, se unió con la llamada “fiesta de los locos”, una especie de carnaval que con el paso del tiempo se ha denominado como el Día de los Santos Inocentes.




Peligro con las bromas

A pesar de que la celebración tiene como tema principal realizar bromas, estas han ido evolucionando con los años. Ahora, algunas personas hacen muchas de mal gusto y otras han puesto su integridad física y la de los demás en peligro.

Es por esto que se deben evitar ciertos tipos de bromas. Aquí algunas:

  • No jugar con la muerte. Ya sea fingir tu propio deceso o el de alguien querido o cercano. Una noticia así es muy impactante.
  • No actos de violencia. Fingir secuestros o asaltos puede poner en riesgo la salud de la otra persona por el susto, además no se puede saber si reaccionarán violentamente.
  • No jugar con fuego. Por la época hay muchas cosas inflamables alrededor, incluyendo cohetillos que pueden generar incendios.
  • Cuidado con darle de comer algo desagradable a alguien, hay personas alérgicas o por los tipos de alimentos podrían ahogarse.
  • No ofendas a nadie, un mal comentario puede generar malas reacciones en las personas, incluso hasta causar depresión.



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