Volatilidad, Incertidumbre, Complejidad, Ambigüedad. VICA, es la norma. Veamos algunos ejemplos. Hace seis años:
Blackberry tenía una posición predominante en el mundo de teléfonos inteligentes. Hoy, está luchando por su existencia.
Whatsapp no existía. Hoy, la aplicación fue vendida a Facebook por $22 billones de dólares y cuenta con casi 800 millones de usuarios activos.
UBER, la compañía que ahora es una amenaza al servicio tradicional de taxis, no había sido fundada. Hoy, cuenta con una estimación anual de ventas de $10 billones de dólares.
AirBNB, la empresa en la web para rentar habitaciones tenía apenas unos meses de existir y hoy tiene una valuación de $20 billones de dólares y una presencia en 34 mil ciudades y 190 países.
Google tenía, en promedio, 800 billones de búsquedas al año. Hoy, el número va por 1.3 trillones de búsquedas al año.
El IPhone iba por generación 3GS, vendiendo 7.37 millones de unidades en un trimestre. Hoy, está vendiendo un promedio de 75 millones de unidades por trimestre.
La cobertura de Internet ha subido de 25% a 40%. Esto implica que casi la mitad de la población mundial está conectada.
Aumentaban los diagnósticos de depresión. Hoy es una de las enfermedades predominantes en el mundo.
Facebook tenía 360 millones de usuarios. Hoy tiene 1,600 millones.
Es abrumadora la evidencia de cambio. Lo que a la radio le tomó 38 en alcanzar (llegar a 50 millones de usuarios), a Angry Birds Space le tomó 35 días.
Si se estima que el 50% de los empleos en la próxima década serán sustituidos por inteligencia artificial y serán reinventadas diversas empresas e industrias, ¿Qué deberíamos enseñar en un mundo como el actual?
Soy padre de dos niños, Juan Ignacio de 8 y Natalia de 5. Quisiera poder orientarles a hacerse algunas preguntas que creo podrán guiarles en este mundo VICA.
Pasión. Gallup estima que el 70% de las personas no disfrutan de sus actividades diarias a nivel global. Muchas personas no tienen un sentido de misión por el cual trabajar todos los días. Anhelo que mis hijos puedan descubrir lo que aman, lo que les apasiona. Encontrar su verdadera esencia. Eso no cambiará aún en un mundo de cambio.
Talentos. Todos nacimos con “ventajas competitivas injustas”, una serie de fortalezas o talentos en donde somos únicos. En palabras de Sir Ken Robinson, “los talentos son como los diamantes, pues si no se descubren y se trabajan se quedan ocultos para siempre”. Anhelo que mis hijos puedan descubrir sus talentos y trabajar para desarrollarlos.
Curiosidad. “¿Por qué Papi?” Esa pregunta es la más común en mis hijos hoy. Todo les es fascinante y nuevo. En palabras de Picasso “todos nacimos genios, pero pocos crecemos y permanecemos así”. Anhelo que mis hijos sigan descubriendo el mundo como si fuera la primera vez todos los días.
Trascendencia más que éxito. Vivimos en un mundo que cuantifica variables superfluas, o donde nos comparamos con otros en lugar de buscar nuestro propio destino. ¿Cuántas vidas tocamos positivamente todos los días? ¿A cuántas personas edificamos o destruimos con nuestras palabras o acciones? Anhelo que mis hijos busquen ser personas de bien, que busquen más que el éxito la trascendencia, que su paso por esta Tierra haya hecho una diferencia positiva.
Pasión, talentos, curiosidad, trascendencia. El mundo ha cambiado. Anhelo que mis hijos nunca olviden los regalos más importantes que tenemos, que están en nuestro ser más que en el tener o en el hacer.