Desde que era una niña tengo memoria de las manifestaciones en Guatemala, nos hemos visto rodeados por ellas durante muchos años. En un día como todos y con un pequeño aviso, se paraliza nuestra ciudad sin que podamos hacer algo al respecto. Yo he crecido, sin embargo, nuestra forma de expresarnos, tristemente no.
¿Cómo nos afecta a todos?
Sea cual sea su causa, pues a lo largo de los años algunas varían y unas causas son constantes, las manifestaciones nos afectan a todos. El país se paraliza y Las escuelas y colegios se cancelan, ya que no quieren que los niños se pongan en peligro mientras van a estudiar, por lo que se pierde contenido que se les iba a dar ese día y en acumulación, se pierden muchos contenidos al año. Asimismo, estudiantes universitarios a quienes no les cancelan clases, pierden la oportunidad de asistir a las mismas, lo cual para algunos puede significar el desistir totalmente de un título profesional. La fuerza laboral pierde días de sueldo, producción y desarrollo que podrían beneficiar al país. A parte de esto, existen personas que pierden mucho más, escuche la historia de una mujer que, atrapada en colas interminables, no llegó al lecho de muerte de su padre, personas que realmente pierden todo al ser víctimas de una causa por la que ni siquiera protestan.
La verdad acerca de nuestra libertad
Mientras Guatemala sea un país libre como se cree que es hoy en día, la libertad de expresión es un derecho, así como existe esta libertad, existe la libertad de manifestarse contra lo que no se está de acuerdo. Sin embargo, los que manifiestan deben entender que su libertad no es ilimitada, llega hasta donde interfiere con la libertad de los demás, pues esa es la verdadera definición de libertad. Como decía el gran filósofo Jean Paul-Sartre “Mi libertad llega hasta donde empieza la de los demás”. Es por eso que los manifestantes no están en su libertad de interferir con la libertad de todos los civiles que quieren ir a trabajar, de los doctores que van a salvar una vida, de los estudiantes que tienen exámenes, de los niños con la esperanza de un futuro más próspero. Esto, no es más que mal uso de sus derechos; libertinaje.
Manifestantes, ¿qué culpa tenemos los civiles?
Manifestantes, es realmente admirable que tengan las agallas de expresar lo que no les parece, de luchar por lo que creen y de salir de sus casas para demandar algo que no se les están dando. Entiendo que en nuestro país específicamente, es difícil hacerse escuchar y se tiene que llegar a los extremos para lograr un cambio. Yo salí a manifestar hace tres años porque solo saliendo todos, logramos quitar a un hombre de la presidencia que no merecía el cargo en el que se encontraba. Sin embargo, parte de la libertad que tenemos de manifestarnos viene con la responsabilidad de asegurarnos que no nos estamos pasando sobre la libertad de otros. La libertad y la responsabilidad vienen siempre de la mano. Por lo que hoy los invito a que se manifiesten en el Parque Central en los alrededores de las instituciones gubernamentales, sin bloquear el paso a civiles que no tienen inconformidades y son puras víctimas secundarias de enredos ajenos. Porque yo me pregunto, ¿qué culpa tienen los niños, los estudiantes, los abogados, las enfermeras, los psicólogos, los periodistas, los médicos, los arquitectos, los ingenieros, los encargados de la limpieza y los seres queridos de un enfermo, de su inconformidad?
La manifestación y la libre expresión son derechos de ciudadanos de una nación libre, sin embargo, ¿no sería mucho más respetable hacerlo de manera responsable sin solo buscar reclamar esta libertad? El desarrollo de Guatemala está en la gente que quiere ir a trabajar, que busca superarse, en la libertad de cada día poder hacer lo que se quiera con el tiempo y energía que se tiene, respetando a los otros. Si creemos que el gobierno de Guatemala no funciona, no seamos nosotros mismos como ciudadanos los que nos impedimos la búsqueda del desarrollo de la casa que compartimos. Pues si estamos todos contra todos y no nos importa a quien perjudicar ¿Cómo vamos a lograr que algo cambie? ¿Ustedes que piensan?