El tiempo se acabó, los diputados del Congreso de la República tenían hasta este sábado 30 de noviembre para aprobar un nuevo Presupuesto General de Ingresos y Egresos del Estado para el Ejercicio Fiscal 2020. Sin embargo, desde el 28 del presente mes, la Junta Directiva del Legislativo decidió ya no convocar a más sesiones plenarias para conocer el tema.
El motivo principal fue la falta de consensos entre las bancadas en el Congreso, por lo que quedará vigente el presupuesto de 2019.
El quinto secretario de la Junta Directiva del Congreso, Aníbal Rojas, confirmó la no aprobación al señalar que no existían los acuerdos necesarios para conocer el presupuesto y que ya no convocarían. Ante el anuncio, el presidente electo, Alejandro Giammattei, expresó el pasado 29 de noviembre que su equipo cuenta con un plan “B”, el cual prioriza la aplicación de ahorro y ejecución eficiente de los recursos.
Giammattei indicó el pasado viernes durante una visita a la sede de los Bomberos Municipales de la zona 12, que en su gestión priorizarán los gastos y la austeridad. Señaló que estarán eliminando los pagos innecesarios para poder invertir los fondos públicos en aspectos que beneficien a la población.
Por su parte, el ministro de Finanzas designado, Álvaro González Ricci, dio a conocer las acciones contempladas ante la no aprobación del presupuesto 2020. La principal es la presentación de una ampliación presupuestaria para cumplir con el compromiso de incrementar los salarios de trabajadores de salud, educación y de la Policía Nacional Civil (PNC).
González Ricci agregó que se estaría aumentando la recaudación de impuestos y disminuirán los gastos del funcionamiento del Estado. Además, comentó que plantearán una medida para rescatar la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) y no descartó la posibilidad que en enero el nuevo gobierno plantee al Congreso ampliaciones presupuestarias.
Alejandro Giammattei expresó que la ley le permite poder hacer enmiendas al presupuesto hasta el 28 de febrero de 2020.
El presupuesto aprobado para el año 2019 fue de Q87 mil 715 millones, debido a ampliaciones hasta el 30 de octubre del presente año, el monto que se le asignará a Giammattei será de Q88 mil 314.3 millones. Lo solicitado por el gobierno de transición fue de Q91 mil 700 millones, el cual no fue aprobado por el Congreso en el tiempo establecido por ley.
¿Por qué no se aprobó?
A principios de septiembre 2019, el Ministerio de Finanzas Públicos (Minfin) presentó el proyecto de Presupuesto General de Ingresos y Egresos para el Estado 2020, al proponer un gasto de Q91 mil 900 millones. A finales de octubre, la Comisión de Finanzas del Congreso dio dictamen favorable al proyecto que dejó un techo fijado en Q89 mil 700 millones.
Desde entonces, los congresistas empezaron a discutirlo y a presentar enmiendas ante la falta de acuerdos entre bancadas y la sospecha de corrupción de parte de algunos diputados.
El parlamentario Jean Paul Briere indicó que el presupuesto de 2019 está más acorde a lo que está viviendo el país. “Creo que el gobierno entrante puede trabajar muy bien con el de 2019, creo que podría irle mucho mejor porque tiene menos compromisos que lo que solicitaron para el 2020”, dijo.
Briere explicó que algunos de los principales factores para no apoyar la propuesta fue que en el tema de nutrición le bajaron Q300 millones, así como una reducción al tema de educación y de infraestructura. El diputado agregó que había unas ONG recién creadas con más de Q100 millones, bonos para pagar devoluciones de créditos fiscal y que le bajaron mucho al rubro en el tema social.
El presupuesto se intentó aprobar en dos ocasiones en el pleno del Congreso, la primera el 20 de noviembre con una moción propuesta por el oficialismo. La segunda, fue propuesta por el diputado Boris España, en la sesión plenaria del 27 de noviembre, en ambas ocasiones no prosperó la aprobación final de la propuesta.
Así quedó el prepuesto aprobado en el año 2018 para el 2019:
