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Un domingo trágico, donde se lamentó la perdida de Juan José Rómulo Lopez Yat, piloto de una avioneta que iba con víveres para Cobán, Alta Verapaz, se desplomo en una calle de zona 9, al lado de las canchas donde se estaba realizando un torneo de tennis con niños, estos fueron los relatos fuertes que nos contó el director del torneo Ian Amaya, que a solo metros de él y los niños cayo la avioneta. ESTO PASO:

Pasaban los minutos luego del medio día del domingo, en unas canchas de tennis ubicadas en zona 9 se realizaba un torneo llamado “Circuito U-GO” del mismo deporte organizado por Ian Amaya y Franz Luna, con el objetivo de brindarle a los niños fogueo y la oportunidad de obtener un ranking UTR (Universal Tennis Rating) un proyecto sobre becas universitarias en Estados Unidos para los miembros de su academia, donde niños menores de 15 años estaban participando pero nunca se imaginaron que los partidos que se disputaban en ese momento iban a ser interrumpidos por una tragedia.

Ian Amaya, Tenista profesional y director del torneo, junto a Franz Luna, comenta que todo iba en orden con los partidos y que solo hacían falta unos cuantos partidos para finalizarlo, cuando ocurrió lo que nadie se imagino. Estas son sus palabras.

“Estábamos en pleno juego cuando escuchamos unos fuertes retumbos, cómo que algo se estrellaba con cosas, volteamos a ver y vimos la avioneta venir hacia nosotros. La avioneta chocaba con los arboles, postes y cables, pero lo peor de todo fue que venía hacia nosotros. Lo primero que pensé fue en los niños, porque estaban muy expuestos, fueron momentos donde no pude moverme y lo único que hice fue jalarlos y decirles a los niños que corrieran para alejarlos de todo, intente sacar mi teléfono para grabar pero no podía encontrar la cámara, estaba en shock” cuenta Amaya

Ian cuenta que cuando cayó la avioneta, cayó al lado de las canchas y que no explotó de inmediato, si no pasaron unos cuantos segundos, aprovecharon eso para poder sacar a los niños y junto a su equipo de organizadores y los padres intentaron que todos estuvieran a salvo, cuando en un momento, la avioneta !Explotó! formando una enorme bola de fuego en el aire. Estás son imágenes segundos después que ocurrió la explosión tomados por Amaya desde las canchas.

“Estabamos si mucho a unos 10 metros del accidente, cuando explotó la onda de calor nos pego a todos, yo, junto a mis compañeros sentíamos como que si nos hubiera quemado la cara de tan fuerte que fue” cuenta Ian.

La avioneta cayo justo a la par de las canchas, también ocurrió la explosión y restos caían en ella, Ian junto a los organizadores, comentan que gracias a Dios no pasó a más, ningún niño salió herido o lastimado solo se asustaron mucho, pero si no hubiera estado esa pared allí o la avioneta hubiera caído en las canchas, la tragedia hubiera sido aún más grande.

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