La segunda economía del mundo ha comenzado un proceso de transformación, que en medio de la crisis financiera de la empresa inmobiliaria Evergrande Group, ha dejado al descubierto cómo las cadenas de suministros globales podrían colapsar y generar una escasez de todo en el planeta. Esta situación, podría derivarse de las nuevas políticas energéticas del gigante asiático.
Mientras Evergrande, una empresa que cotiza en la bolsa de Hong Kong, tiene 200 mil empleados, negocios en 280 ciudades de China y US$300 mil millones en deudas, hace todo lo posible por salir a flote, el gobierno sigue adelante con un increíble plan. Uno que ha comenzado afectar el comercio mundial.
El gobierno de China ha comenzado con un ambicioso plan para contener los precios y reducir las emisiones en el medio ambiente. Y es el arranque de este plan, para alcanzar una economía sostenible e igualitaria, el que ha puesto a temblar a muchos. “Racionar el consumo de electricidad, es la primera fase de este ambicioso intento de Pekín para lograrlo”, asegura el diario el diario elEconomista de España.
Y aunque las medidas sólo afectarán al sector industrial de China, por ahora, después estas llegarían a impactar los hogares. Pero no solo empresas chinas operan en el país, las hay de los Estados Unidos y Europa, y estas comenzarán a ver como escasean los insumos que utilizan en la elaboración de sus productos y tendrán que tomar decisiones.
“Muy pronto, los mercados globales sentirán el impacto de una escasez de suministros, desde textiles, juguetes hasta piezas de máquinas”. Lu Nomura, analista económico en China.
Así por ejemplo Apple y Tesla, comienzan a sentirse inquietas. Pues según la agencia de noticias Reuters, varios de sus proveedores han anunciado que suspenderán la producción en varias fábricas por unos días. Y es que el anuncio les llega en el momento más álgido de la temporada de productos electrónicos.
Un ejemplo de estas suspensiones es la de Unimicron Technology, proveedor de Apple, que detuvo la producción en tres de sus subsidiarias desde el 26 al 30 de septiembre. Medida adoptada con el fin de cumplir con las políticas del gobierno.
Concraft, productos de componentes auditivos para el iPhone, anunció la suspensión de labores en sus plantas, durante cinco días. Y aunque ha asegura que utilizará sus inventarios para suplir la demanda, la medida no ha calmado del todo a sus compradores. Otros fabricantes en China, aseguran que seguirán operando con normalidad, hasta que les llegue el aviso del gobierno.
Entre tanto, las grandes fabricas de China, como las de textiles, aluminio y productos del agro han comenzado a bajar su ritmo de producción. Esto debido a que casi la mitad de las regiones de China, no cumplieron con los objetivos de consumo energético que estableció el gobierno. Mismos que ahora se imponen a fuerza en estos lugares. Y lo más irónico, señala una publicación de Bloomberg, es que esta crisis sucede en medio de una escasez en el suministro de carbón.
Con información de Reuters, Bloomberg y elEconomista