La motocicleta y el riesgo de perder la vida imagen

Este tipo de transporte es uno de los preferidos por las personas debido a su rapidez y ahorro de los gastos de mantenimiento; pero muchos olvidan que requiere de responsabilidad.

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“Era por aquí cerca”, “era la primera vez que no usaba casco” o “no llevaba protección” son algunas de las frases que se pueden escuchar de motoristas lesionados en las salas de emergencias del Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS). Son diferentes historias en las que algunos lamentablemente pasaron a ser parte de las estadísticas de personas que fallecen por accidentes en motos o sufren lesiones graves debido a un choque.

Este tipo de transporte es uno de los preferidos por las personas debido a su rapidez y ahorro de los gastos de mantenimiento; pero muchos olvidan que manejar una motocicleta requiere de responsabilidad, que no todos están preparados o tienen la experiencia para conducir una. Aquí te compartimos tres historias de vida de hombres que creyeron que al subirse en este transporte “no pasaría nada”, pero los accidentes suceden y ellos han formado parte de los cientos de relatos que no acaban bien.

Foto: Osman Velásquez

“Tenía que cumplir con mi trabajo”

El viernes por la noche del 15 de noviembre le cambiaría la vida a Alfredo Hernández. Después de una larga jornada de trabajo él y sus compañeros debieron apoyar a los que se encontraban en la feria de Jutiapa, ya que trabajan como despachadores de camiones en una distribuidora.

“Mandaron un grupo que salió más temprano, entre esos iba yo, no hubo tiempo de ir a recoger mis implementos por lo retirado del lugar, por eso emprendí el camino. Íbamos todos mis compañeros en moto y yo estaba adelante, cuando de repente apareció un carro que se metió en mi carril y me aventó”, contó Hernández.

Alfredo no se detuvo a pensar por la urgencia de la solicitud del trabajo que su vida podría correr peligro si no llevaba sus implementos, esto le costó una lesión en la pierna. “No llevaba casco, rodillera, ni guantes, ya que debía ir más lejos de donde se encontraban para recogerlos”, expresó.

Solo recuerda que lo llevaron al hospital de Jutiapa, que los doctores de turno le aplicaron un líquido como alcohol y le pusieron más de diez puntos. El lunes después del accidente fue trasladado al IGSS, en donde los doctores se percataron que tenía una infección en la herida y coágulos de sangre, ya que la misma no fue tratada de manera correcta al momento del incidente. “Gracias a Dios en el IGSS se dieron cuenta y desde que empezaron a tratarme la mejoría ha sido notable. Me siento mejor, en mi caso la atención brindada ha sido la mejor, no me puedo quejar”, indicó Alfredo.

Foto: Archivo Relato

“No pensé que andar en moto sería peligroso”

Sergio Romero tiene 19 años y a su corta edad presenció un terrible incidente. El joven trabaja para Súper 24, pero un día después de salir de un partido de fútbol, junto a su supervisor, se subieron a la motocicleta. Sergio iba de pasajero y, por ende, no llevaba casco. Sin embargo, cuando bajaban por la Roosevelt la moto resbaló por el pavimento que están arreglando, lo que causó que saliera volando a la parte trasera del escape donde su cuello y cabeza cayeron sobre las luces de la moto. “En ese momento no me sentía lastimado, iba a levantarme, pero precisamente una patrulla estaba circulando en ese lado y los agentes me pidieron que no me moviera. Luego, llegaron los bomberos y fui trasladado al IGSS”, contó Romero.

No sufrió ninguna fractura, solo el brazo se dislocó y quemaduras en el cuello, a pesar del fuerte golpe. “A mi amigo no le pasó nada porque llevaba casco, yo fui el que más se lastimó. Había escuchado de las personas bastantes comentarios negativos sobre el IGSS, que son malos y dejan que se mueran antes de que hagan algo al respecto, pero a mí me han tratado muy bien. Me he sentido cómodo y bien atendido”, dijo Sergio.


“Tenía el deseo de comprar una moto porque pienso que es un transporte rápido, pero ya no porque es complicado y no cualquiera puede manejar una o tiene la experiencia necesaria para conducir”, expresó Romero.

Foto: Osman Velásquez

“Nunca había tenido un accidente hasta que un perro apareció”

Erick López suele conducirse en vehículo y motocicleta. Al usar la moto siempre lleva los implementos de protección, ya que para él es importante resguardar su vida. Una mañana salió de su casa a hacer un mandado cerca y por ser una distancia corta prefirió llevarse la moto. Con casco, chaleco y su equipo de protección emprendió el viaje. Manejaba a 30 kilómetros por hora, cuando de repente salió un perro y sin previo aviso se metió entre las llantas. “Apareció de la nada, la moto cayó encima de mi pierna y gracias a Dios y por cargar casco no sufrí lesiones en la cabeza”, compartió López.

La pierna de Erick se fracturó en tres desde la rodilla para abajo, su tibia, peroné y tobillo fueron afectados. De inmediato, el cuerpo de bomberos lo trasladó al IGSS. “Los doctores están esperando que se desinflame la herida y me han atendido bien. Todo el proceso ha sido rápido”, expresó.

“Manejo motocicleta desde hace 10 años. Lo hago porque me ahorro tiempo, gastos de gasolina y parqueo. Es el primer accidente que sufro. Yo les recomiendo a los motoristas que sean prudentes, ya que no sabemos en qué momento un accidente nos puede cambiar la vida, así como en mi caso que fue por un perro y mis lesiones fueron graves. Las personas que conducen motocicletas deben llevar siempre su equipo de protección”, comentó López.

Foto: Archivo Relato

Los peligros

En la Ciudad Capital circulan en días hábiles alrededor de 350 mil motocicletas. Este se ha convertido en el transporte número uno con mayor accidentes. Durante las fechas de fin de año incrementan el 40 por ciento de incidentes, indica el Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS). De enero a octubre de 2019 se han registrado 12 mil 863 casos de motoristas solo en el IGSS de Accidentes de la Calzada San Juan.

Los viernes y sábados por la noche, las quincenas y fin de mes, son las fechas que más accidentes se reportan. Los lugares más propensos a incidentes en motocicletas en la capital son: ruta al Atlántico, Bulevar los Próceres, Aguilar Batres, Calzada Roosevelt, El Periférico y zona 1.

Las lesiones más frecuentes de los motoristas son: traumas de cráneo o encefálico grado tres, fractura de las piernas, brazos, entre otros. Por ello, es importante tomar en cuenta las siguientes recomendaciones de seguridad vial al conducir una motocicleta:

  • Utiliza implementos de seguridad como cascos, chumpas, guantes y rodilleras.
  • Respeta las señales de tránsito y los semáforos en todo momento.
  • No manejes en estado de ebriedad o algún narcótico.
  • Evita conducir sobre los espacios peatonales.
  • Utiliza el pidevías para cambiar de carril.
  • No conduzcas rápido en asfalto mojado.
  • No lleves menores de edad en la motocicleta.
  • No subas a ningún pasajero que no tenga casco. 
Foto: Osman Velásquez

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