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Antigua Guatemala, Sacatepéquez – Palacio Arzobispal, km 3.8, aldea San Juan del Obispo, ubicado cerca de Antigua Guatemala, fue el hogar del obispo Francisco Marroquín.

Al principio fue llamada San Juan Bautista de Guatemala. Un siglo más tarde, su nombre se modificó con el que hoy se le conoce, San Juan del Obispo, en memoria de Francisco Marroquín.

Se dice que el pueblo surgió de un terreno para siembra de milpa. El terreno fue otorgado a un vecino notable por haber participado en la conquista y haber dado sus servicios a la sociedad.

El obispo Francisco Marroquín llega a Guatemala y se dirige al vasto terreno de milpa a principios del siglo XVI, quien luego de instalarse un tiempo decidió construir con sus propios fondos el primer Palacio Arzobispal.

El pueblo es pequeño y colorido. Sus calles, al estilo arquitectónico de Antigua Guatemala, te cuentan su historia a su manera.

Considerado como un “pueblo tranquilo”, San Juan del Obispo es conocido también por su producción de nísperos. Los productores mantienen sus fincas en las faldas del Volcán del Agua, al cual la altura le brinda una calidad extraordinaria en sus frutos. También son conocidos por sus diferentes clases de producción de chocolate y café.

En su pequeña plaza puedes observar el primer Palacio Arzobispal de la antigua ciudad de Guatemala, junto a los 3 volcanes más icónicos del país: Agua, Fuego y Acatenango.

Foto: Juan José Muralles 

Por encontrarse en las faldas del Volcán de Agua, el viento fuerte es muy común en el lugar.

A pesar de poseer una extensión pequeña, la historia de la aldea brinda mucho a la historia de nuestro país.

Fue una de las primeras ciudades fundadas durante la Conquista española. También vio nacer al escritor guatemalteco Luis de Lión, secuestrado el 15 de mayo de 1984 por elementos de inteligencia del Ejército de Guatemala.

En memoria de él existe una casa museo dedicado a su trabajo.

Palacio Arzobispal

La propiedad es un edificio de grandes dimensiones, posee un importante claustro que en la actualidad se considera como una de las principales expresiones de la arquitectura barroca colonial.

Dicha obra arquitectónica fue terminada en 1547.

Foto: Juan José Muralles 

Sus pinturas al frente de la iglesia siguen siendo originales de la época, sin recibir ningún retoque, por lo que se ha convertido en un atractivo turístico por conocedores o aficionados al arte.

Foto: Juan José Muralles

El Palacio Arzobispal fue la residencia por muchos años del obispo Marroquín.

En el siglo XVIII, el convento dejó de ser habitado por los franciscanos por la expulsión que hiciera el régimen liberal.

Actualmente es habitado por las monjas de la congregación Bethania. Además, el recinto también funciona como museo.

En el interior de las grandes paredes podrás apreciar, a través de distintos elementos, parte de la historia de San Juan del Obispo; incluso, podrás viajar en el tiempo al tener contacto con pinturas, escrituras y elementos de la época. 

Si deseas visitar el pueblo y conocer más de la historia del personaje que aparece en el billete de Q100, solamente debes dirigirte rumbo a Antigua Guatemala, Sacatepéquez, y luego tomar la carretera que te lleva a San Cristóbal El Alto y justo en el km 3.8 llegas a la aldea San Juan del Obispo. 

Recuerda llevar efectivo para apoyar el turismo local. Si llegas acompañado de tu mascota, limpia su suciedad y lleva la mente clara para conocer más de tu país. 

¿Te animas a conocer más lugares de Guatemala este año? 

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