Antes de tener smartphones y relojes inteligentes, la tecnología era muy diferente de como la conocemos hoy. En este nuevo segmento, hablaremos de cómo eran los abuelos de nuestros gadgets favoritos y cómo evolucionaron hasta ser los televisores inteligentes, autos que se manejan solos, y espero que algún día cabinas telefónicas que viajen en el tiempo -se vale soñar-.
Hoy presentamos: Historia de la primera computadora:
Hay mucha polémica sobre cuál fue exactamente la primera computadora, para no desenterrar al bisabuelo ábaco y muchas otras herramientas de cálculo, partiremos de la primera máquina de cómputo que trabajaba con electricidad.

En 1936, Konrad Zuse, un ingeniero alemán que trabajaba fabricando aviones, en una de esas pláticas que tenemos con nosotros mismos, cuestionando la existencia y cansado de tener que hacer cálculos a mano, decidió hacer algo diferente con su vida, renunció a su trabajo para dedicarse a crear una máquina que calculara. Después de dos años, con dinero prestado por sus amigos y familiares, presentó al mundo la primera máquina electromecánica programable, originalmente llamada Zuse V1, la cual más tarde y debido a los misiles alemanes usados en la Segunda Guerra Mundial, V1 cambió su nombre a Zuse Z1.

La Z1 estaba construida de 20 mil piezas y pesaba casi 1 tonelada, aunque su primera versión no funcionaba del todo bien, su funcionamiento se asemeja bastante a las computadoras actuales, contando con una unidad de control, unidad de cálculo, una de memoria, unidad de ingreso y otra de salida. Los resultados se almacenaban en cintas perforadas con capacidad de 22 bits, la velocidad de procesamiento era de 1Hz y tenía capacidad de realizar cuatro tipos de operaciones: suma, resta, multiplicación y división.
A pesar de ser un prototipo, la Z1 fue perfeccionada con la Z2 y Z3, posteriormente al finalizar la Segunda Guerra Mundial, la empresa fue vendida y relocalizada en Suiza, donde se llegaron a fabricar 251 modelos de la Z4, el resto es historia…