La deep web es lo más profundo y oscuro de la Internet. Se guardan muchos secretos que llegan a atrocidades que atentan con todas las normas de la sociedad. Es todo aquello que no está anexado a ningún buscador.
En estas páginas sobresalen todas aquellas que tienen las características de blogs, foros o páginas con contenido plano. Estas no se encuentran con un simple motor de búsqueda como Google o Yahoo.
Las autoridades que se encargan de monitorear el Internet han tratado durante años de combatirlos, para evitar crímenes que suceden, en este rincón de la web. Drogas, armas, pornografía infantil, animales exóticos e incluso asesinos aparecen en oferta para los usuarios.
No es fácil de entrar, quienes suelen ingresar cambian la dirección IP del computador y así evitan ser fáciles de detectar por la Policía. Para lograrlo utilizan un programa llamado Tor, que permite entrar a la red Onion, parte de la deep web.
Sicarios
Muchos dicen que es lugar para cometer crímenes. Sicarios y asesinos ofrecen sus servicios para torturar y matar a cambio de dinero. Algunos, incluso crean sus foros dentro de la deep web y enlazan un video en vivo, mientras cometen sus crímenes. Millones de dólares es lo que ganan estos oscuros personajes, que cobran y ven la vida de varias personas como un simple negocio.
Hackers
Es uno de los temas que más suena en este rincón de Internet. Miles de foros y blogs enseñan a los usuarios a hackear computadoras o redes sociales como Facebook. En ocasiones, se dan incluso conferencias de audio o video de cómo empezar, tutoriales de cómo codificar y engañar al sistema.
Shows sangrientos
Esto es lo que ha hecho famoso a la deep web desde su comienzo. Muchos usuarios se han dedicado a crear sus programas de streaming donde torturan, asesinan y mutilan a personas o animales.
Uno de los casos más famosos es de unos jóvenes rusos, quienes tenían su foro en esta red. Se dedicaban a viajar y simplemente a asesinar vagabundos con un golpe. Las escenas aparecían explícitas, en las que los muchachos se burlaban de sus víctimas o degustaban de la sangre de ellos.
Lastimosamente, ni los animales se salvan de dichos shows. Una chica asiática, se dedicaba a aplastar cabezas de animales vivos, sean gatos, cachorros, pájaros o ratones. Eran transmitidos en vivo y solamente lo hacía si era invertida cierta cantidad de dinero a su cuenta.
Sin duda, es la parte más oscura del Internet, y los programas que facilitan tal red dejan impunes a quienes cometen los crímenes inhumanos, que se ven detrás de la pantalla.