Jorge Rodas, el seleccionado retirado, busca darle vida a su hijo
Le diagnosticaron leucemia y en menos de seis meses tuvo que llevarlo a otro país porque su vida está en peligro.
Se trata de Pablo Andres, el hijo de Jorge Rodas, el ex jugador de la selección nacional, un chico de 16 años de edad, a quien la enfermedad, capaz de generar un cáncer que podría ser criminal le llegó silenciosamente.
Jorge Rodas, sí, ex jugador, ex rojo, ex crema, ex aurora, ha comenzado una campaña denominada Unidos por Andrés, con la cual busca recaudar fondos para los gastos que representa padecer una enfermedad como la de su hijo.
La rutina de Pablo Andrés fue interrumpida un 19 de junio, con un fuerte dolor de estómago, el cual fue el preámbulo a lo que seguía. El diagnóstico fue de leucemia mieloide aguda.
Pablo Andrés, este año iba a graduarse con sus compañeros del Bachillerato, pero ahora está en un hospital padeciendo los síntomas de esta enfermedad, que generan fatiga, infecciones recurrentes, aparición de hematomas con facilidad, debilidad, dolor de cabeza y otros síntomas que podrían llegar a un paro cardiorrespiratorio.
En Guatemala, la leucemia provoca la muerte de muchos niños, debido a los escasos recursos médicos con los que se cuenta.
Jorge dice que jamás imaginó que le tocaría a él. Y que ha vivido momentos indeseables, porque ha visto cómo su hijo estuvo el primer mes en una cama de un intensivo, con regletas en los brazos, donde le aplicaban diferentes medicamentos al mismo tiempo.
Y la incertidumbre. Esa de no saber qué va a pasar porque esa enfermedad puede condenar a cualquiera a desarrollar un cáncer y solo un trasplante de médula podría salvarlo.
El diagnóstico de la leucemia mieloide se produce con cifras muy elevadas de células leucémicas en la sangre, lo que puede causar problemas circulatorios graves, con síntomas neurológicos, respiratorios o incluso colapso circulatorio.
El ex jugador recauda fondos para lidiar con los costos del hospital en Canadá, a donde fue llevado su hijo de emergencia para estabilizarlo.
“Es lo que un padre haría no importa lo que le digan a uno, tomé la decisión sin pensarlo, porque quiero ver vivo a mi hijo”.
Jorge ha iniciado una cruzada para poder darle vida a su hijo.