Miles de jóvenes principalmente entre 20 y 30 años se dedican a maquilar información. Sus dedos se mueven ágilmente y con rapidez, algunos incluso sin ver la pantalla.
Su mente procesa miles de palabras, ideas, argumentos….pero la mayor parte de sus textos se resumen en mensajes de 140 caracteres, que tú, yo y todos consuminos mientras gozamos de nuestro sagrado tiempo de procastinación.
Estos ninjas digitales monitorean redes sociales y medios de comunicación, siendo ésta una de sus principales tareas, para crear mensajes de temas controversiales y actuales.
Tienen dos herramientas principales de trabajo: la computadora y el celular, desde esos aparatos generan gran parte de toda la información que más 14 millones de guatemaltecos leemos diariamente. El trabajo lo pueden hacer desde una oficina, su casa y hasta desde la calle, lo importante es escribir sobre determinado tema.
Así transcurre la vida de quienes trabajan en un “net center”, los tienen varias funciones desde defender, desacreditar, hasta fortalecer o difundir un mensaje.
Son especialistas en creación de contenidos virales y también de etiquetas o hashtags, su imaginación y creatividad siempre vuelan alto.
Este ejército de jóvenes súper tecnológicos optan por este tipo de trabajos por que reciben ingresos que les ayuda a pagar la universidad, salir de apuros o perseguir sus ambiciones y/o gustos personales.
¿Cómo operan los Net Centers?
Los Net Centers por lo general utilizan cuentas falsas conocidas como troles (trolls), y detrás de ellas se esconden infinidad de rostros.
Son capaces de incomodar a cualquiera. Hay personas que hasta han cerrado sus perfiles en Twitter y Facebook, pues los ataques son constantes.
Se activan en determinado momento.
El ejército digital conformado por estos jóvenes entra en acción cuando hay algún tema que le incomoda a él o al grupo para el que fue contratado. Es por esto, que la red se activa de acuerdo a ciertos temas, en un horario y día específicos. Pues los Net Center son unidades reactivas a la coyuntura política, económica, cultural y social del país.
Por ejemplo, en las elecciones de 2015, los partidos políticos Libertad Democrática Renovada (Líder); Unidad Nacional de la Esperanza (UNE) y el Frente de Convergencia Nacional (FCN), contaban el servicio de un Net Center que les servía para desacreditar a sus adversarios o hablar bien de sus propias organizaciones así como de sus candidatos.
En enero de 2014 funcionarios del entonces gobierno del Partido Patriota, reconocieron que en nivel 13 del Instituto Guatemalteco de Turismo (Inguat), funcionaba una oficina para monitorear la “opinión pública”, pues la peor crisis de esa agrupación estaba por llegar y era necesario tener un “Net Center”.
Actualmente, uno de los “Net Center” más fáciles de detectar son aquellos que rebolotean alrededor de toda la temática que envuelve al Ministerio Público (MP) y a Comisión Internacional contra la Impunidad (CICIG).
Miles de perfiles son fotos falsas (muchas veces hasta se repiten imágenes y se cambia solo el nombre) empiezan a bombardear en redes sociales logrando posicionarse dentro de las top tendencias en Twitter y consecuentemente influeyendo en la mente de nosotros, los perfiles “reales”.
El periodista Mario Cordero los llama “net centers de la impunidad” y que se esconden tras un rostro falso o la figura de un huevo en Twitter.
Los “Net Centers” no solo sirven para fines políticos. Este recurso también ha sido utilizado por el sector privado para defender a sus corporativos o bien para lanzar campañas en contra de la competencia de sus marcas. De hecho, un ejecutivo de una empresa confiesa a Relato que ellos tienen un Net Center para monitorear a la competencia y lanzar mensajes en contra de la misma cuando es necesario.
Legal o ilegal
Hay vacío legal en cuanto el tema; sin embargo, las autoridades si han actuado cuando se ven inmersos temas relacionados con la pornografía infantil.
También se puede incurrir en el delito de difamación de acuerdo al artículo 164 del Código Penal, si la publicación se hace por un medio de divulgación y provoca odio o descrédito, o que menoscaben el honor, la dignidad o el decoro de una persona ante la sociedad.
El artículo 342 “B” del Código Penal señala que comete el delito de pánico financiero todo aquel que elabore, divulgue o reproduzca por cualquier medio o sistema de comunicación, información falsa o inexacta que menoscabe la confianza de los clientes, usuarios, depositantes o inversionistas de una institución financiera.
Al fin de cuentas esos tres delitos también los pueden cometer no solo quienes están en un Net Center, también usted desde sus cuentas en redes sociales.