Se nos vino mayo encima y con él, el día de las madres, para muchos ese es un día para salir a cenar y comprar ese regalo que tanto hemos visto y añorado, es un día para responder a tanto que nos han dado.
Para los que trabajamos en callcenters es un día en el que tenemos la oportunidad de llevarlas a comer dependiendo de nuestros horarios, ya sea que trabajes en la noche o en la mañana, para compartir con nuestras madres.
Aprovechando el sueldo y los descuentos que la mayoría de callcenters dan, podemos pasar un buen momento sin gastos muy elevados y poder tener ese detalle para nuestras madres.
Para muchos esta situación nos llena de un sentimiento de satisfacción, el solo hecho de poder tener uno el dinero propio para poder invertir en nuestras madres. Aún cuando el trabajo no tiene el mismo valor social que otros trabajos puedan tener, se nos hace fácil hacer de menos ese estigma cuando recibimos el pago.
Sin embargo desde la perspectiva de una “mamá callcentera” la situación es diferente, dentro del ritmo regular de un callcenter donde cada persona debe cumplir con una meta de producción basada en tiempo en llamadas, este día tan especial no pasa de ser un día más, la mayoría se quejan que es el único trabajo que han tenido donde el principal reconocimiento que se ve es la próxima promoción a vender por el especial del día de las madres junto con un dulce, lo cual llega a frustrar a algunas sobre todo a las que no pueden pasar la tarde con sus hijos y que al llegar casa no lograron aguantar despiertos para comer con mamá y se quedan nada más con el consuelo que cumplieron con la cuota del día y eso se reflejará en la próxima quincena. Muchas esperan tener un día de trabajo lleno de honores y tiempo libre para poder pasar un día relajado, otras esperan algún tipo de actividad temática, pero se quedan con el sinsabor de pasar el día exactamente como todos los demás.
Trabajar en un callcenter le da opciones a unos y otros no, sin embargo, por un buen sueldo solemos sacrificar ciertas cosas que parecen tan triviales pero que no lo son, de hecho, pueden ser cruciales para la vida de algunos.
Hablando con una compañera sobre el tema se mencionó que a pesar de ser empresas que tienen al elemento humano como piedra angular para la producción de ingresos, realmente no solemos ver ese interés en el personal que todos esperamos, no todo es tener una televisión en el área de trabajo para ver algún partido o película, sino más bien falta ese ambiente cálido y humano que nos haga sentir que somos más que un numero de extensión. Queda nada más ver que para muchas madres, especialmente las solteras, es una gran oportunidad de trabajo y de poder generar un ingreso que oscile entre los Q4 mil Q5 mil. Podría decirse que la falta de reconocimiento es compensada por el pago mensual para poder cubrir las necesidades económicas del hogar.
Aunque no para todos, el día de las madres es una fecha especial por lo que habría que tomar en cuenta que son la piedra angular en el desarrollo de nuestra sociedad y luego de siglos de sufrir de exclusión laboral, política, económica entre muchas otras, no se debería escatimar recursos para celebrar estas fechas y especialmente en las empresas pues solo hay que ponerse a pensar cuantas madres conocemos en nuestro trabajo, que hacen el esfuerzo de educar a sus hijos y trabajar.
Si eres madre callcentera compártenos como fue tu Día de las Madres.
Un relato de: C.P. – Mi buen amigo callcentero