“Anuk”, un golden retriever, posa en el suelo junto a la imagen de Ronald Mcdonald. Cada vez que alguien entra, levanta la mirada y se vuelve a acostar.
A simple vista, todo el lugar es colorido. De la pared cuelgan los nombres de los benefactores, así como algunos cuadros de arte. La sala es todo un lugar de juegos, lleno de colores y formas. “Ahí se olvidan un poco las penas”, dice Josefa, una de las huéspedes.
Las casas infantiles son un “oasis” para todas aquellas familias que vienen del interior a alguno de los hospitales de la ciudad, pero que no tienen recursos para pagar un hospedaje, indica Beatriz Vidal, de la Fundación Infantil Ronald Mcdonald.
Josefa o “José”, como prefiere que le digan, es la segunda ocasión que visita la Casa Infantil No. 2, ubicada a un costado del Hospital Roosevelt. Ella y su hijo vienen desde Chiquimula. “La primera vez que vine, permanecí un mes y diez días”, señala.
“José” comenta: “Mi hijo tenía cita en la clínica de niño sano todos los días, debido a las quemaduras que sufrió en la terraza con unos alambres eléctricos. Del impacto, cayó hacia atrás y no para delante, porque si no se muere”.
Existen 365 casas Ronald McDonald en 43 países, que responden a las necesidades de alojamiento de las familias con niños que reciben tratamiento en algún hospital. La primera casa abrió sus puertas en 2005; la segunda, en 2009 y la última, en 2013.
Desde 2005 a 2018 han logrado hospedar a más de 21,591 familias y servido más de 537,947 raciones de alimentos.
A diario se alojan 44 familias. Las habitaciones están decoradas con un tema específico, desde princesas hasta notas musicales, y cada una está patrocinada por una institución o persona particular.
En el primer nivel, un clóset blanco capta las miradas de todos. En el frente y con letras de colores se lee “clóset mágico”, lugar donde la ilusión de muchos niños se convierte en realidad. “Cuando nos visitan por primera vez, les damos la oportunidad de que escojan un juguete nuevo. Esto les hace mucha ilusión porque varios de ellos no han tenido la oportunidad de tener uno”, asegura Beatriz.
En Guatemala, de los niños enfermos que se diagnostican, el 41 por ciento abandona su tratamiento por falta de recursos.
Una nueva casa
Ante la falta de espacio se ha dejado de hospedar a un aproximado de 40 niños y sus familias cada mes, quienes necesitan un lugar dónde quedarse en la capital. Estas personas son referidas por una de las 17 unidades médicas que apoya la Fundación.
Comprando los planos, eres parte de la construcción de la nueva casa Ronald McDonald, que será un proyecto de 3,500 m2. Contará con 4 niveles totalmente equipados, 40 habitaciones, comedor, cocina, áreas recreativas y sociales, para que las personas puedan sobrellevar las largas jornadas que les toca experimentar en los centros asistenciales. Con esto se espera beneficiar a más de 2,000 familias cada año.
El costo del plano es de Q25, y lo puedes encontrar en varios puntos:
Restaurantes McDonald’s de todo el país
Red de Agencias BAC
Distribuidores Tarjetazo
Plataforma digital YO ME UNO
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