El objetivo principal de un médico es mantener y recuperar la salud humana, dar lo mejor de sí y ayudar a las personas que no tienen acceso fácil a un tratamiento, además de otorgar calidad de vida. Así es Shriners Internacional, que realizó jornadas médicas para niños de escasos recursos en Guatemala.
Con un equipo de nueve personas, incluyendo médicos, asistentes, enfermeras, una fisioterapista y una trabajadora social, Shriners Internacional se aventuró por tercera vez en el país para realizar una jornada médica, cuyo objetivo era ayudar a niños que usualmente no tienen acceso a los tratamientos y que les impide reintegrarse a su vida cotidiana.
Esta vez fue una ocasión especial porque se atendieron alrededor de 60 niños, de entre 0 y 18 años, con afecciones ortopédicas y quemadura, además de haber decidido buscar casos de menores con labio o paladar hendido para tratarlos.
Esta es sin duda una misión filantrópica, ya que como cuenta Miguel Ángel Valdez, presidente de Guatemala Shriners Club, la misión de ayudar se estableció hace casi 150 años y desde entonces no ha cambiado, ya que su principal objetivo es darle un tratamiento digno a quienes no tienen esa accesibilidad.
Caso Hogar Seguro
Shriners dio a conocer más su causa, debido al caso de las siete víctimas de la tragedia ocurrida en el Hogar Seguro Virgen de la Asunción, quienes fueron atendidas en uno de los hospitales de la red en Cincinnati, Ohio, Estados Unidos.
Viajando al extranjero
Durante su labor social, los médicos voluntarios también encuentran casos que en ocasiones, por la gravedad, necesitan ser atendidos en el extranjero; por lo tanto, los Hospitales Shriners para Niños han implementado un departamento especial para admisiones de pacientes internacionales.
Cada menor de edad que es admitido sin ninguna forma de discriminación, según sea su caso o condición médica, es enviado a alguno de estos 22 hospitales de la red. Quienes califican tienen que pasar por un proceso para el traslado, junto a un familiar, y a partir de ello es enviado desde Guatemala hacia el hospital designado en cualquier parte, ya sea en Los Ángeles, Cincinnati o Tampa, Estados Unidos o en Ciudad de México.
Todos los pacientes son evaluados y reciben tratamiento, así como atenciones después de la operación, tanto médicas como psicológicas y sin ningún costo. Los especialistas de Shriners tienen como único objetivo brindar atención profesional a niños que alguna vez creyeron no tener oportunidad de ayuda y que ahora pueden lograr una vida normal.
Una ayuda a quien más necesita
En Guatemala ocurren al menos 50 mil casos de quemaduras al año, cuya mayoría son niños de escasos recursos y menores de 14 años. Las causas principales de atención son: derrame de líquidos calientes, contacto con fuego, accidentes con electricidad, fuegos artificiales o manipulación de pólvora, por lo que las quemaduras y sus secuelas forman parte del grupo más referido.
Fuente: Guatemala Shriners Club, en alianza con Sanatorio El Pilar.