En ocasiones, no nos detenemos a pensar ¿qué sería si algo de nuestro cuerpo fallara y no tuviéramos la oportunidad de cambiarlo? Casi siempre no valoramos la salud y lo que menos hacemos es preocuparnos por cuidar nuestro cuerpo. Hasta que algo nos duele, le damos importancia.
“El mundo se me detuvo al enterarme de que mi nieta no podría escuchar”, cuenta Virgilio Rodríguez, presidente de la Fundación Ayúdame a Escuchar.
Para muchos su anhelo es poder escuchar la voz de sus padres por primera vez. ¡Sí! Aunque no lo creas, este es el deseo de muchos niños y jóvenes, poder ESCUCHAR. Algo que es común y no le damos importancia, sería un sueño para algunos. Esto es difícil lograrlo, pero te cuento que existe una alternativa que se llama implante coclear y se puede lograr.
¿Qué es el implante coclear?
Es un dispositivo que se implanta en la cóclea para transmitir señales eléctricas por medio de vibraciones sonoras, las cuales estimulan el nervio auditivo enviando señales al cerebro para que interprete sonidos “reconocibles”.
¿Cómo funciona?
El implante estimula el oído interno a través de señales eléctricas que recibe el sonido, enviando hacia el procesador para analizar y transformar la información para que el cerebro reconozca e interprete el sonido.
Se debe tener en cuenta que el implante coclear no es similar a la función que realizan los audífonos auditivos. Los audífonos amplifican los sonidos y el implante coclear estimula de forma directa el nervio auditivo.
¿Quiénes aplican al implante coclear?
Los candidatos para el implante coclear pueden ser tanto niños y adultos que padezcan sordera o un problema auditivo grave. Se les realizan varios exámenes médicos previos como neurológico, psicológico, audiólogo, entre otros; para cumplir con los requisitos y ver si la persona es apta para el implante.
En una ocasión, tuve la oportunidad de presenciar la activación de un implante coclear. No se imaginan la emoción que se siente al observar cómo los padres del pequeño lloraban y gritaban de alegría al percatarse que su hijo reaccionaba al sonido.
¿Cómo se realiza la cirugía del implante?
El procedimiento para la colocación del implante coclear tiene un costo de Q224 mil y dura aproximadamente de dos a cuatro horas. Al paciente se le coloca anestesia general y el procedimiento consiste en una incisión bajo la piel, a un costado de la oreja, colocando la parte interna del implante en la cóclea y los cables que contienen los electrodos.
La recuperación tarda unos ochos días y luego de ese tiempo las personas deben asistir a sus terapias de lenguaje y continuar su vida normal. Al mes de la cirugía, se procede a la activación de implante coclear y comienza una terapia auditiva verbal.
“Siempre ha sido mi pasión, me ha encantado trabajar con problemas auditivos y es un trabajo que con el tiempo es muy significativo ver los avances”, relata Silvana Gudiel, terapista de la Fundación Ayúdame a Escuchar.
¿Existe una fundación en Guatemala?
La Fundación Ayúdame a Escuchar “Barbara Nicolle” es la primera en Guatemala que ayuda a conseguir apoyo económico a las familias que luchan para el implante coclear de sus hijos. Nace a raíz de la lucha que realiza la familia de Barbarita, para lograr que se le colocara a sus dos años el implante coclear. En el camino se dieron cuenta que en Guatemala no existía este tipo de apoyo para otras familias, que también buscan desesperadamente cómo ayudar a sus hijos.
“Nadie creía en la Fundación, las personas pensaron que estábamos locos por querer luchar por los sueños de tantas personas que tienen problemas auditivos en Guatemala”, expresa Rodríguez.
Actualmente son muchas las personas que se acercan a la Fundación, pero la misma no cuenta con los recursos necesarios para poder apoyarlos a todos. Yo los invito a que se sumen a esta noble causa y juntos podamos cambiar la vida de muchas familias.
Se pueden acercar a las instalaciones ubicadas en la 6a. avenida 17-50, zona 11, Colonia Mariscal, o contactarlos al teléfono 2441-4356 y preguntar de qué manera pueden colaborar. Esto para hacer realidad el sueño de niños que anhelan escuchar.
Testimonios de familias:
“Para nosotros la Fundación es nuestra segunda casa, todo este proceso con la ayuda de Dios y don Virgilio ha logrado que podamos colocarle el implante a nuestra hija”, dice la Familia Pineda. Su hija Nahomi de 9 años fue implantada hace seis meses.
“Me gustaría que mi hija se pudiera desarrollar por sí misma, que pueda llegar a la universidad, que tenga un buen trabajo, yo sé que ella anhela con todo su corazón el poder escuchar”, comparte Jenifer Urizar, mamá de Karily, quien espera que ella sea la próxima implantada.
“Las expectativas que tengo con mi hijo son grandes. Quiero que sea un niño normal, al igual que mis otras hijas. Que luche por sus sueños, que no tenga limitaciones”, cuenta Milvian, mamá de Rodrigo, quien hace un año recibió el implante.
“Barbarita vino a cambiarle la vida a mucha gente sin esperarlo”, expresa Rodríguez.
Estos y muchos más testimonios son de familias que tienen la esperanza que sus hijos puedan escuchar algún día. Hay muchos padres que darían todo para que sus hijos puedan escuchar y en esta Fundación, pueden volver realidad este sueño.