Mi mamá es amante del buen café y mi papá también lo era, quizá por eso desde pequeña aprendí a disfrutar su aroma, sabor y la sensación que produce en el paladar una buena taza, sobre todo en estas tardes de lluvia, ¿se te antoja uno?
En lo personal lo que más me gusta del café es su aroma. Me encanta cuando entro a una sala o a la oficina en la mañana y percibo ese característico olor que invade hasta mis sentidos.
Para mí el mejor café del mundo es sin duda el guatemalteco y les confieso que aunque a veces me gusta tomar una taza por las mañanas, el mejor momento para mí es la tarde, sobre todo si llueve, porque el sueño me ataca fuerte. Aunque no soy de las que usa la típica frase ¿nos tomamos un cafecito? Para reunirme con alguien o incluso para tener una cita, me gusta explorar lugares distintos y probar las variedades de café, sola o con amigos. Y para ti ¿cuál crees que es la mejor hora para tomar café?
Mientras disfruto de una buena taza de café, no les digo la marca para no hacer propaganda y degusto un pastelito, disfruto de una tarde lluviosa de junio, de esas que te hacen entrar a algún lugar para refugiarte y pasar el agua.
Les confieso que en realidad también entré para poder escribir mi Relato. Desde donde estoy sentada observo a muchas personas solas, en pareja, con amigos, jóvenes y adultos, cada quien en su mundo como dicen, pero todos con un común denominador, disfrutar de un café en sus diferentes versiones. Eso sí, la mayoría con sus computadoras o celulares en mano, aprovechando que junto con su factura obtuvieron la clave de Wifi.
Y aunque me considero una amante de los helados, con estas lluvias y en honor a mis papás, los cambio por completo por un buen café.
Me gusta mucho también escuchar el sonido de la lluvia, pero entre el bullicio de la gente y la música de fondo, las canciones de Justin Bieber, DJ Snake, Katy Perry, Skip Marley, Ed Sheeran, Maroon Five y Wiz Khalifa, por mencionar algunas de las que he escuchado hasta ahora y que acaparan mis oídos, mejor opté por disfrutar de la música y conformarme con ver la lluvia caer.
Desde donde estoy veo cómo desfilan los meseros con vasos y tazas de todos tamaños, algunos con café latte decorados con corazones, mensajes y hasta con figuras de animales, otros llevan macchiatos, mocas, frappés, café cardamomo, café helado o el preferido de muchos, el capuchino.
Observar a la gente me hace preguntarme tantas cosas, quiénes son, qué hablan, qué piensan del café, qué tanto saben de esta bebida milenaria que hoy es el centro de su reunión y qué tanto saben del café de Guate.
En Guate y el mundo
El café ha inspirado canciones, novelas, diversas recetas, grandes y pequeñas empresas, ha generado empleos, es incluso medicinal y hasta es utilizado para elaborar bisutería y otros objetos, entre otros miles de usos que se le han dado, pero, ¿qué tanto sabes del café nacional?
Es un orgullo saber que en muchos lugares del mundo el café guatemalteco en sus diferentes variedades es muy cotizado y que llega a tantos países desde sus principales regiones de cultivo como Antigua, Atitlán, San Marcos, Huehuetenango, Cobán, Acatenango, Fraijanes y el oriente, según la Asociación Nacional del Café (Anacafé).
Sabías que Guatemala ocupa uno de los 10 primeros lugares que surten de café al planeta. Solo en 2016 se vendieron 3 millones 950 mil quintales de café oro y aproximadamente el 90 por ciento fue adquirido por 10 países.
Además, la Organización Internacional del Café (OIC), estima que el consumo por persona en Estados Unidos es de 5.9 Kg al año y que sus principales proveedores son Colombia (29%), Brasil (22%), Guatemala (14%) y Perú (5%), entre otros.
Pero la riqueza y diversidad de nuestro café radican en los microclimas, eso es lo que dicen los expertos, ya que generan un balance entre lo suave, frutal y cítrico. Por ejemplo, el café que se produce en Cobán, es muy distinto al de Antigua Guatemala, pero fue el último que comenzó a abrir brecha en el extranjero en la década de 1970 y que continúa manteniendo su calidad a nivel mundial. Sin duda son buenas noticias para el café de Guate.