Gastrosexual, a la cama pasando por la cocina imagen

Por aprecio o como un modo de conectar, el gastrosexual es un genuino amante de la cocina.

Las opiniones e imágenes de este artículo son responsabilidad directa de su autor.

Podrías ser parte de esta nueva tribu urbana y no saberlo. Algunos famosos la integran y son el referente de miles de sus seguidores, Leo Messi, Rafa Nadal, Daniel Craig y Jake Gyllenhaal se cuentan entre las filas de la nueva tendencia mundial.

¿Te gusta picar cebollas y a tus amigas en la cama?, entonces seguro eres uno de los llamados “gastrosexuales”. 




Se les define como jóvenes profesionales entre 25 y 44 años, de estatus social elevado, con una vocación a impresionar a los demás. Algunos cocinan para conocer personas y tener relaciones sexuales, otros por agradar a familiares y amigos. Sin embargo, los miembros de esta tribu comparten un interés común, “el amor por la cocina”.




Entre sus ídolos figuran Jamie Oliver y Gordon Ramsey, a quienes siguen en sus redes sociales y están al tanto de lo que estos hagan. Masterchef y Hell’s Kitchen son un “must view” en su tiempo libre. Y sus redes sociales suenan cada vez que FoodPorn sube algún contenido nuevo.

Por la razón que sea, los “gastrosexuales” han ganado terreno y hoy los lumbersexuales, spornosexuales y vetrosexuales parecen cosa del pasado. Cocina, erotismo y sexo parecen ser la receta perfecta para sobresalir en este nuevo mundo.

Satisfacción personal y agrado a la familia




Aunque se casó hace unos 13 años, su gusto por las artes culinarias afloró tan solo 3 veranos atrás. Desde entonces, Javier, cada día que vuelve del trabajo pica, sazona, marina y busca recetas en foodtube.

“Por las tardes, cuando llego de la oficina, empiezo a preparar el almuerzo del día siguiente”.

Para Javier, Jamie Oliver es el indiscutido gurú de la cocina y sus recetas la guía para agradar a su esposa y amigos. “Lo admiro porque hace las cosas de forma básica y no se complica, además me gusta mucho la tendencia del slow cook”.

Los fines de semana, Javier visita el mercado para encontrar el producto más fresco posible para preparar a sus familiares, allegados y vecinos, las más novedosas recetas de Oliver. Brisket, pollo o cerdo, no importa, cocinar es una gran satisfacción y la mejor forma de mostrar agrado a sus seres queridos.

“Aunque esté cansado de una semana dura de trabajo, cocino y eso ayuda a relajarme, me llena de satisfacción personal y hago algo bonito por mi esposa”.

La cocina como un fin sexual

A diferencia de Javier, Alberto es un treintañero que gusta de la fiesta y el sexo casual. Cuando la “casaca” no funciona, la cocina cierra el trato.

Algunas mujeres caen rendidas con un detalle, un piropo o porque no decirlo, una robusta billetera. Pero a un hombre que cocina para ellas, ninguna puede resistirse, esta es la filosofía de Beto.

“Cocinar te hace ver tierno, accesible y sobre todo comprometido con ellas”. Su estrategia es simple, llévalas a tu cancha y el premio será tuyo.

Poder cocinarle a una mujer implica haber entablado una conversación amplia sobre sus gustos, miedos y aficiones. “Para entonces ya sabes que le gusta y como agradarla, es solo cuestión de dar el toque final, una invitación a cenar”.

Beto confiesa que la estrategia no es cien por ciento efectiva, pero el rango de éxito supera al 80 por ciento. Es decir, de cada diez invitaciones a su cocina, al menos ocho se van “bien servidas”.

Cómo saber si eres un gastrosexual
1. ¿Tienes entre 25 y 44 años?
2. ¿Puedes afrontar gastos elevados en ingredientes y utensilios para cocinar, sin que afecte tu presupuesto?
3. ¿No cocinas por supervivencia, más aún lo haces para impresionar o con un fin seductor?
4. ¿Alguna vez has utilizado tus habilidades culinarias para seducir a alguien?
Si respondiste al menos a tres preguntas con un sí, probablemente eres un gastrosexual. 

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