Las opiniones e imágenes de este artículo son responsabilidad directa de su autor.

“Hasta que abran Los Aposentos nos moveremos”.

La pandemia ha afectado de distintas maneras a todos los ciudadanos guatemaltecos.

Los diferentes sectores económicos buscan volver a nivelar sus utilidades tras las pérdidas ocasionadas por el cierre del país.

A pesar de que cada día más comercios abren sus puertas, todavía existe una parte de la población que está tratando de sobrevivir a la pandemia.

El sector turístico ha sido y sigue siendo uno de los más afectados, ya que su apertura se mantiene paralizada por los casos de COVID-19. Esto ha generado que varios lugares del país mantengan prohibido el ingreso de turistas, lo cual ha afectado a quienes utilizan estos lugares para vender alimentos.

“Desde hace dos meses tenemos aquí nuestra venta. Hasta ahorita han molestado porque nosotros estemos aquí, comenta Guadalupe”, quien ahora tiene su puesto a la orilla del Libramiento de Chimaltenango.

Aproximadamente hay 20 puestos sobre la carretera. El Libramiento de Chimaltenango se ha convertido en el nuevo sitio para que las personas vendan sus productos. “Nosotros teníamos un lugar en Los Aposentos, pero ahorita que está cerrado necesitamos vender para comer”. Solamente nos han dicho que no nos pongamos muy a la orilla de la carretera”. 

Guadalupe tiene su pequeño puesto antes del km 55 de dicha carretera. Desde las 7:00 a.m. hasta las 5:00 p.m. ofrece atoles, panes y elotes. “Tenemos que vender para sobrellevar esta crisis. No sabemos cuándo abrirán Los Aposentos, pero cuando lo hagan nos iremos de aquí”.

Algunos conductores prefieren estacionar su auto, mientras degustan de un atol en los puestos improvisados, otros prefieren llevar un pan con café para el camino. “No tengo miedo, primero Dios no pasa ningún accidente”.

De lado a lado se puede observar las sombrillas de colores donde cada vendedor busca llegar a su meta para subsistir otro día más. “Hay de todo, desde elotes hasta churrascos”. “Quienes más paran a comer son los pilotos de camiones o a veces personas que van de paso”, cuenta Guadalupe.

Bajo el sol y la lluvia los nuevos inquilinos del Libramiento de Chimaltenango solamente buscan un espacio para vender.

Autoridades

En diferentes entrevistas para otros medios, el alcalde de Chimaltenango, Carlos Simaj, negó que él tuviera alguna responsabilidad con respecto a la ocupación de los vendedores y menos para desalojarlos.

“El ente rector del libramiento es el Ministerio de Comunicaciones, desde el momento en que se construyó hay una prohibición de poner cualquier tipo de negocio, sin embargo, hay unos terrenos particulares o privados. Considero que la responsabilidad legítima sería del Ministro de Comunicaciones para que pueda venir a desalojarlos y dialogar con las personas”, mencionó el alcalde Simaj.

Los representantes de la Constructora Nacional, S.A. (Conasa), empresa que hizo el proyecto de cerca de Q500 millones, mencionaron: “Es un tema delicado, pero le compete a la Municipalidad”.

El Libramiento de Chimaltenango durante la época lluviosa ha dado de qué hablar y es nuevamente este proyecto que muestra que su valor no es el de una “mega obra”, como lo dijo en conferencia de prensa el expresidente, Jimmy Morales, tras los derrumbes e inundaciones que se han visto en los últimos días. 

Todas las noticias, directamente a tu correo

Recibe todas las noticias destacadas de Relato.gt, una vez por semana, 0 spam.

¿Tienes un Relato por contar y quieres que nosotros lo hagamos por tí?

Haz click aquí
Comparte
Comparte