Todo comenzó cuando el vicepresidente Jafeth Cabrera declaró, el lunes de la semana pasada, que hay un plan para desestabilizar al Gobierno. Luego, el jueves 16, el presidente Morales declaró la existencia de fuertes rumores “bien fundamentados” de un Golpe. No obstante, aseguró que “no le da temor”.
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Lo primero que se podría pensar cuando se habla de un Golpe de Estado es una gran participación militar. Helicópteros surcando el cielo, tanques en los umbrales de la ciudad y, gracias a la televisión, imaginamos al viejo Monty Burns de Los Simpsons sobre un tanque Panzer Tiger 1 repartiendo democracia, mientras las Valquirias de Wagner llevan ante Odín a las almas de los caídos.
Pero no, los Golpes de Estado ya no suceden de esa forma, al menos no de este lado del mundo (hay ciertas naciones en las que sí se reparte democracia con bombas).
Ahora bien, si las estimaciones del Presidente son reales… ni Francisco Rivas, ministro de Gobernación; ni William Mansilla, ministro de la Defensa, parecen estar involucrados. Ellos aseguran que no se está orquestando nada, y los mencionamos porque son las primeras carteras que podrían verse involucradas si vemos un poquito la historia de este terruño. Asimismo, explicaron que tampoco tienen conocimiento de que se fragüe algo tan complicado como un Golpe… y encima aseguran que no hay ninguno, persona o institución, que tenga la capacidad, hoy por hoy, de gestarlo.
Pero, entonces, ¿qué nos está diciendo el Presidente? Se sabe que tiene reuniones con diputados, entre otras personas, nacionales y extranjeras, pero todos coincidimos en que este tipo de declaraciones de sacarlo del Gobierno pesan demasiado como para hacerlas sin fundamento. Aunado a eso, Morales dice: “Me han generado hasta rumores de Golpe de Estado, bien fundamentados, y me llaman; pero no me da temor, yo fui electo democráticamente”.
Ante tales declaraciones, y con nuestro antecedente histórico, en la redacción de Relato llegamos a los siguientes conceptos partiendo de la información pública:
a) En los Golpes de Estado que la nación ha vivido, el Presidente derrocado se enteró cuando llegaron a tocarle la puerta y le pidieron gentilmente que se retirara (sarcasmo aparte).
b) El único Presidente que supo de un Golpe antes de que sucediera fue Serrano Elías… Pero ese fue un autogolpe, por tanto no cuenta.
c) Jimmy Morales es el primero en llevarlo a la opinión, pero aunado a eso dice no temer y que confía en la democracia que lo llevó al poder. Por tanto, hasta que no suceda, y en este caso, hasta no tener nombres de los posibles beligerantes, debería de ser entonces el presidente Morales quien nos explique a qué se refiere.
Es que, de lo contrario, en lo que todos pensaremos es en una cortina de humo. ¿Con qué fin? Solo quienes plantearon el escenario podrían iluminarnos con la verdad.
Para no especular acudimos al constitucionalista Mario Fuentes Destarac, quien nos ayuda a aterrizar todas nuestras dudas para este Relato, antes de empezar a ver Lobos del aire imaginarios, surcando nuestro espacio aéreo.
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¿Qué es un Golpe de Estado?
– Es, básicamente, el rompimiento del orden constitucional. Un golpe de fuerza, pues no es una acción de Derecho; consecuentemente, lo que se está haciendo es romper el orden jurídico establecido, violando la Constitución, porque es precisamente esta la que le otorga el mandato al Presidente de la República por el periodo de 4 años.
¿Pero esto se logra solo a través de la violencia?
– Existe, ya en el mundo moderno, el Golpe de Estado técnico. Es donde no necesariamente hay una acción cruenta, sino que hay posibilidad de que pueda haber un relevo de la Presidencia sin que haya una violencia.
Lo que uno puede leer en redes sociales, o puede llega a pensar, es en un comando militar con Wagner de fondo sacando al Presidente del Gobierno…
– No necesariamente, existen ahora situaciones en las que prácticamente el Presidente pierde la autoridad. Incluso ha habido situaciones en el pasado en las que se queda el mismo Presidente, pero hay alguien más quien asume el poder político.
En este contexto, ¿son situaciones del pasado mundial o guatemalteco?
– Digamos en el pasado latinoamericano.
Asumir entonces que el último que se enteraría de un Golpe de Estado es el Presidente, ¿es correcto?
– Bueno, puede ser. Pero puede ser que sea un proceso que el mismo Presidente está percibiendo, ve que hay una propensión a poner fin a su mandato y que finalmente se consuma a través de un acto.
Ahora aterricemos con la declaración del presidente Morales. Usted, ¿cómo ve esa declaración, es oportuna?
– Bueno, si se siente verdaderamente amenazado de que en algún momento se pudiera interrumpir su mandato, pues o lo hace ver o lo denuncia. Puede ser que él está viendo distintas situaciones, o una convergencia de fuerzas que pudieran amenazar su mandato presidencial.
Pero si los ministros de la Defensa y Gobernación dicen no tener conocimiento (aunque usted ya aclaró que no necesariamente debe ser por la fuerza), si ellos desconocen el tema… entonces lo que queremos entender es: ¿por qué un Presidente llega a decir esto? ¿Con qué evidencia?
– Pero claro, la evidencia habría que preguntársela a él. Es quien lo afirma y, consecuentemente, es quien tendría que acreditar cuáles son las razones para haber hecho esa afirmación. Él es quien debe proveer estos elementos que lo están haciendo a él dar ese tipo de afirmación.
Los otros señores puede que no tengan esa información, que sí tiene el presidente de la República. Entonces ellos podrán hablar y decir lo que les respecta. “No percibo ninguna circunstancia que pudiera redundar en un Golpe de Estado”, expresarán, pero el Presidente de la República sí lo está afirmando, entonces, consecuentemente, tiene que aportar, presentar las denuncias correspondientes.
¿Pero para qué desperdiciar la oportunidad? Entonces, ¿por qué no hacer la denuncia y dar nombres y apellidos? Entra la duda, si dice esto el Presidente, por qué en lugar de declarar “creo que hay ratas en mi casa”, mejor decir, “estas son las ratas que me están molestando en mi casa”.
– Bueno, si es que sabe quiénes son. Pueden haber situaciones que no necesariamente tengan nombre y apellido. Solo puede ser que él sienta, por situaciones que vive, que hay una amenaza de Golpe de Estado. En todo caso si él está haciendo esta afirmación, obviamente tendrá las pruebas que acrediten esta declaración. A él es a quien hay que preguntarle por qué se siente amenazado.
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Era entonces el momento de acudir con el presidente Jimmy Morales. Es decir, hablar con su vocero y saber si nos podía ahondar en el tema. Sin embargo, nos respondió que no podía atendernos.
Seguiremos esperando a que el presidente Morales explique a qué se refería con sus palabras, así evitará que la población hable de cortinas de humo, –en buen chapín– que vea monos aparejados, “que si fue para desviar la atención de que su hijo y hermano ya no guardan prisión preventiva”, y todas esas cosas que se mencionaron.
