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¡La crítica es la esencia de la creación! Y si el sistema 

de enseñanza pública debe ser criticado, ¡Yo lo criticaré!

Orson Welles


La educación es el tema central que se debate hoy en todos los países, independientemente de su grado de desarrollo. Los países con niveles superiores de desarrollo están interesados en determinar hasta dónde llegarán las grandes investigaciones de la ciencia y la tecnología; cómo se plantearán en el futuro los tipos y modelos de educación y si realmente los ciudadanos se están educando o son unos recipientes de información. En cambio, en nuestros países el tema educativo sigue empantanado en temas como la alfabetización y la capacidad de la educación pública.

El cine, afortunadamente, no ha sido ajeno al tema de la enseñanza. El propio cine es en sí mismo un gran instrumento educativo. Siempre he escuchado decir que la economía es tan importante que no podemos dejarla solo en las manos de los economistas, como también que la política no podemos dejarla solo en las manos de los políticos. Asimismo, considero que al ser la educación el pilar fundamental del desarrollo de los pueblos no puede ser dejada solo en las manos de los maestros. Todos los actores y sectores sociales deben involucrarse en ella.

Sin duda la producción cinematográfica mundial sobre la educación es inmensa. A menos que se dedicara uno a tiempo completo a localizarlas, es imposible conocerlas todas. En consecuencia, me concentraré en las películas que he tenido la oportunidad de ver y disfrutar varias veces. 

 Porque hay películas que merecen verse más de una vez y siempre encontramos nuevos elementos dignos de análisis y reflexión. 

 Así, como en una obra literaria que nos ha impactado: debe leerse cuantas veces queramos disfrutarla de nuevo, repensar el contenido y el sentido de la misma.

Soy hijo de dos maestros y yo mismo he disfrutado impartiendo clases. Me siento maestro. Tengo los mejores recuerdos de todos mis maestros desde la primaria hasta la universidad. Por tanto, he considerado al magisterio una de las profesiones más nobles, esenciales y generosas. Por ello también me inspiran tristeza y compasión quienes escogen la enseñanza como medio de sobrevivencia sin tener la pasión y el amor necesarios. El actor y director de cine Sacha Guitry escribió ¨las clases deberían ser apasionantes. Pero, para eso, se necesitan profesores apasionados¨.

Pues de eso trata esta columna. Comentar, aunque sea brevemente, las películas acerca de maestros y estudiantes apasionados. Alguien me sugirió que el título de esta columna debería ser ¨Películas que deben ver quienes deseen ser maestros¨ y no deja de tener razón. Sin embargo, opino que las mismas deben ser vistas por todos los que se interesan por el tema educativo… por aquellos que habiendo sido maestros se cuestionen a sí mismos si cumplieron con su responsabilidad como tales. Estoy seguro de que algunos se sentirán incómodos ante la pregunta: ¿Qué clase de maestro he sido? Además, considero que en muchos despertará el interés por discutir sobre la calidad de nuestros maestros, sobre la efectividad de la educación en nuestro país. Que así sea.

La enseñanza y la educación son mucho más que planes, programas y métodos; mucho más que un currículo. Es un tema fundamentalmente humano. Se trata, en esencia, de enseñar a pensar y no entrenar en cómo y qué se debe pensar. En esto radica la crisis de la educación de nuestros días: nos invade de información, pero no nos invita a pensar.

Ya sé que están pensando que mucho rollo y tienen razón. Comentemos las películas que considero todo maestro –o no– debe ver antes de morir. Como ha estado moda hablar sobre lo que uno tiene que hacer antes de morir, pues no está de más que, para no estar fuera de onda, sugiramos estas cintas que a lo mejor nos definan si realmente estamos viviendo. Vamos al grano… vamos al cine.

1.- The Male Animal. Con Henry Fonda y Olivia de Havilland. Director, Elliot Nugent. (1942) Título en español: El Macho.




La película se desarrolla en un campus universitario, cuyo contexto histórico se caracteriza por una hostilidad sistemática a las ideas nuevas y un fervoroso anticomunismo. Tres profesores han sido expulsados por tener ideas comunistas y un cuarto tiene riesgo de correr la misma suerte, pues ha anunciado que leerá una carta que dejaron unos condenados a muerte: dos obreros de origen italiano. El escándalo que genera constituye la esencia del film.

El profesor de literatura (Henry Fonda) tiene que enfrentarse no solo a las autoridades académicas, sino a su propia conciencia.

Lo interesante de la película es el manejo del problema académico que ha planteado el profesor en medio de lo más importante para los dirigentes universitarios: obtener el campeonato de fútbol americano. Es la lucha entre un profesor que piensa y cree en la libertad de cátedra y todo un andamiaje burocrático cuyo objetivo primordial no es la enseñanza, sino el campeonato de fútbol. La enajenación que significa el deporte en las universidades es expuesta brillantemente. De igual manera los prejuicios son presentados como lo que son: una inmensa ignorancia.

Estupenda película que recomiendo no solo por su belleza cinematográfica, sino por su profundidad temática: libertad para encontrar y decir la verdad.

2.- The corn is green. Con Bette Davis. Director Irving Rapper. (1945) Título en español: Cuando el amor florece.




Una profesora de un pueblo minero de Gales, Inglaterra, tiene como alumnos a los hijos de los mineros, cuyo futuro inmediato es el miserable presente de sus padres: acabar sus vidas prematuramente en las minas. Esta profesora (Bette Davis) se esmera con pasión para demostrar a sus pupilos que hay otro mundo, distinto del que viven. Anhela convencerlos de que el estudio es el camino de su liberación.

Es una película que nos muestra cómo el papel de una auténtica maestra es abrir la mente de sus estudiantes y darles instrumentos en la consecución de sus ideas y sus sueños.

La esencia del film se resume en una de las críticas que un terrateniente le hace a la profesora: ¨Con gente como usted, que enseña a leer, escribir y tener ideas, Inglaterra se volverá un sitio peligroso”.

3.- Los 400 golpes. Con Jean-Pierre Leaud. Director Francois Truffaut (1959)




Considerada obra maestra de la cinematografía, esta cinta retrata fielmente las diversas causas de la delincuencia juvenil. Es la historia de un niño de 14 años (Jean-Pierre Leaud) rodeado por un ambiente familiar y escolar que no le otorga sentimiento de pertenencia. Para su madre y su padrastro, el niño aparece más como un estorbo que como miembro de la familia. La madre, además, tiene un amante, cuya relación descubre accidentalmente Antoine (el niño).

En la escuela las cosas no son distintas: Antoine tiene un profesor chapado a la antigua, intolerante e impaciente. Dada tal situación, el espacio natural es la calle y esta sustituye a la familia y la escuela. Con su mejor amigo roban una máquina de escribir y es enviado a un centro correccional juvenil en donde las circunstancias empeorarán sus sentimientos de rebeldía e inconformidad.

Recuerdo que la película Los 400 golpes me impactó mucho. La fotografía, la ambientación, la actuación de los niños, los ritmos narrativos son impecables. Es una película para repensar la realidad, para reflexionar profundamente sobre nuestros actuales problemas de violencia. Cuando la familia y la escuela no existen, la calle, con todo lo que implica, las sustituye.

4.- Los olvidados. Con Roberto Cobo y Alma Delia Fuentes. Director Luis Buñuel. México, 1950.




Así como Buñuel se inspiró en el cine del italiano Vittorio de Sica para realizar su cinta, supongo que Francois Truffaut se inspiró en esta película de Buñuel (sin ser tan directo y crudo). Estamos ante una película que no divierte, sino golpea y duro. No hay juicios de valor. Muestra descarnadamente la miseria en un barrio marginal de la ciudad de México que bien podría ser una urbe en cualquier país latinoamericano.

No pretendo especular sobre los propósitos de Buñuel. Alguien podrá afirmar que el hacer cine es hacer cine y punto. No obstante, en esta película vemos la descripción de la miseria en una sociedad profundamente desigual. Es una película digna de verse y discutirse. Hay en este film buena fotografía (Gabriel Figueroa), buen guion, excelente caracterización y un ritmo narrativo efectivo. Como telón de fondo, una sociedad desigual, injusta y enferma. La Unesco la definió como Memoria del Mundo y el mismo Buñuel en una oración resume su mensaje: ¨Los niños son olvidados por su familia como son olvidados por la sociedad entera¨.

5.- Los niños del cielo. Con Mohammad Amir y Najimir Farrokh. Director Majid Majidi. Irán 1997.




Esplendorosa y sublime producción cinematográfica iraní. El ya mundialmente reconocido director Majidi nos obsequia una poesía fílmica. Es una cinta maravillosa que se disfruta intensamente y cuya narración es simple y extraordinaria a la vez.

El niño mayor de tres hermanos es enviado a recoger unas zapatillas de su hermana que han mandado a remendar. Accidentalmente las pierde en el camino a casa y esto le produce angustia y ansiedad. Le explica a su hermana lo sucedido con la promesa de que, si guarda el secreto, no decir nada a los padres, él hará todo por recuperarlas. Ambos hermanos, que asisten a escuelas distintas, acuerdan intercambiarse los zapatos tenis del niño en tanto aparecen las zapatillas extraviadas.

Un día aparece la convocatoria a una maratón, cuyo tercer premio son precisamente unas zapatillas. El hermano decide participar con la intención de obtener el tercer lugar y así poder reponer las zapatillas a su hermana.

Me interesa destacar varios aspectos de esta película. En primer lugar, como en Los 400 golpes y Los olvidados, se enmarca en familias pobres pero con la diferencia de que en esta no hay desintegración. Por el contrario, en medio de las penurias económicas hay padres responsables y amorosos, hay solidaridad, preocupación por la educación y sentido de pertenencia a un núcleo familiar. Las circunstancias, como para toda familia pobre, aunque adversas, no socavan el sentido del trabajo, la dignidad, el amor familiar y la esperanza.

6.- Los Coristas. Con Gerard Jugnot. Director Chistophe Barratier. Francia 2004.




Intensa película que nos presenta claramente dos métodos de enseñanza: el autoritario que cree que la represión, la disciplina férrea, la amenaza y el castigo son efectivos; y el sistema que tiene confianza en el ser humano, lo respeta y valora, reconoce sus capacidades y le otorga esperanza.

La contratación de un maestro de música en un instituto correccional de menores constituye la llegada de una nueva mentalidad educativa. El maestro Clement Mathieu trastorna el funcionamiento autoritario del reformatorio al otorgarle a los internos una relación de respeto, reconocimiento, cariño, amistad y confianza. El nuevo método muestra rápido sus frutos. El proceso de transformación de los alumnos se evidencia en mejor autoestima, motivación por aprender y una expresión de sentimientos largamente escondidos o reprimidos.

7.- Ni uno menos. Con Minzh Wei y Huike Zhang. Director Zhang Yimou. China 1999.




El director y profesor de una escuela multigrado rural de China tiene que ausentarse de su trabajo para visitar a su madre enferma. El alcalde del pueblo contrata a una niña (Minzh Wei) para que se haga cargo de la escuela hasta el regreso del maestro. La condición fundamental es que no debe permitir que ningún estudiante deserte. Ni uno menos, le advierten. Empieza así una de las películas más maravillosas que he visto. Las precarias condiciones económicas del pueblo, el abandono de la escuela por parte del Estado, la inexistencia de material didáctico y la desconfianza de los alumnos hacia una maestra casi de su misma edad hacen surgir en la niña sus mejores cualidades: entrega, comprensión, imaginación, creatividad y autoridad. Lo anterior demuestra que es la adversidad y no la comodidad la que hace crecer a los seres humanos.

Uno de los alumnos se escapa a la gran ciudad en busca de trabajo y surge la aventura de su recuperación y retorno a la escuela… todo esto le otorga a la cinta el sentido del compromiso y la responsabilidad.

Con esta película concluimos la primera parte de producciones cinematográficas que abordan en tema de la educación.

Ha sido mi intención que las reseñas y los comentarios de las películas hayan despertado al menos curiosidad en los lectores. Si lo he logrado, estoy seguro de que después de verlas, algunas ideas rígidas y prejuicios se habrán desvanecido. Los lectores asumirán una mirada más atenta a lo que acontece en el mundo de la escuela y en cualquier ambiente en que se desenvuelvan.

El blog de cine de Alfonso Portillo




Alguna vez fue Presidente pero eso no importa aquí, en esta columna solo escribirá de cine y literatura.

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